Aunque estuvo cantando durante 106 horas, 7 minutos y 18 segundos, el artista dominicano Carlos Silver no pudo lograr la hazaña que inició el pasado viernes 29 de marzo: romper el Récord Guinness de más horas cantadas de forma ininterrumpida.
La razón de no haber logrado el récord fue que incumplió la regla de los 30 segundos, es decir, que hizo pausas de más de 30 segundos entre canción y canción, tal como certificó Carlos Tapia Rojas, adjudicador y supervisor del libro Guinness World Records.
Primera vez. Fue en diciembre de 2016 cuando Silver se propuso por primera vez romper el récord de más horas cantando que actualmente posee el cantante hindú Sunil Waghmare, quién cantó durante cuatro días y nueve horas, un equivalente a 105 horas.
Sin embargo, aunque Carlos logró superar esa cantidad de horas, su hazaña no fue reconocida en aquella ocasión por los Récord Guinness, que alegó que las pruebas fueron insuficientes.
En aquella ocasión, sin embargo, el país celebró el logro y meses después el artista informó que su hazaña no fue aprobada.
Segundo intento. Apoyado en el lema “RD no se rinde”, Silver se encaminó nueva vez a lograr esta hazaña que inició el pasado viernes 29 de marzo y finalizó en la mañana de ayer.
A pesar de que en esta oportunidad tampoco fue certificada, esta vez tuvo a su favor que los jueces de Récord Guinness sí dijeron presente. Llegaron el martes al Parque Eugenio María de Hostos, donde estaba ubicada la casa de cristal en la que Carlos se encontraba cumpliendo su reto.
A su salida, Silver dijo que “este reto pone en riesgo mi vida pero yo lo asumí y le dije a mi mamá: ‘madre, si yo me muero en el terreno entiérrame con una sonrisa’. Yo no hice Guinness para relacionarlo con nada de la política, yo odio la política, odio los políticos… y entiendo que es tiempo de salvar este país de los ladrones”, expresó el artista aunque no sabemos si lo dijo con total raciocinio, pues horas antes había hablado algunas incoherencias, debido a su estado.
De acuerdo al doctor Cruz Jiminián esto es fruto del la falta de descanso. “Cuando llegué al parque una hora antes de él cumplir el reto estaba obnubilado y cuando llegué, me dice ‘yo no he hecho nada policía, perdóneme’, es decir, que ya estaba hablando incoherencias”, dijo el doctor a ¡Alegría!
Aunque Carlos quería continuar cantando, Jiminián no lo aprobó: “Yo lo desautoricé porque ya entonces entraría la parte médica y si le pasaba algo a él yo sería el culpable”.