Carnaval de las Flores: el rostro festivo y musical de Haití

Carnaval de las Flores: el rostro festivo y musical de Haití

PUERTO PRíNCIPE. Si hacía falta  un gran evento que sirviera como inmensa catarsis colectiva que hiciera una diferencia entre la tristeza y la alegría, entre la pesadumbre que deja en el ánimo  la situación de tragedia y miseria social, para operar como un gran resorte social hacia la esperanza y el optimismo, ese era el Carnaval de las Flores.

Se desarrolló con éxito en Camps du Mars (Campo de Marcos), una plaza que hasta hace unos meses estuvo llena de carpas improvisadas acogiendo refugiados del terrible terremoto del 10 de enero del 2010. Hoy, ya no hay ninguna. Y en lugar de la tristeza, durante el carnaval,  la alegría, el baile y la música fueron el trío predominante.

Convocado por el Ministerio de Turismo y aprobado por el Consejo de Ministros, el Carnaval de las Flores rebosó la calle dispuesta para el desfile de carrozas, comparsas individuales y colectivas, y los más de treinta grupos musicales populares que protagonizaron este encuentro de la gente haitiana consigo misma y sus visitantes, casi todos provenientes de la diáspora nativa residente en Canadá y Francia, entre otros puntos.

Un carnaval distinto.  El de las Flores es un carnaval diferente al que desarrollamos los dominicanos en el Malecón de Santo Domingo. No es un día, sino tres. Se inicia a las cinco de la tarde con el desfile de la primera carroza y permanecerá vivo y vívido hasta las cuatro, cinco o seis de la mañana, en un incansable ir y venir de la gente.

La música vibrante, viva y acompasada y la forma de bailarla de todos aquí, es  un distintivo singular. Las raíces rítmicas de lo africano, marcan cada paso. Es una alegría singular, contagiosa que pregona sus notas y no deja respiro. Pasan una tras otra las representaciones, que son vistas desde un palco presidencial a la altura de tres pisos por el nada tradicional mandatario Michell Martelli, quien, cuando es invadido por la música, deja su poltrona y desciende a bailar en la calle con la gente, creándole una complicación a su seguridad, pero conviviendo con la gente estos momentos.

“Crear eventos”.  La ministra de Turismo de Haití, Stephanie Balmir, quien estudió Hotelería en República Dominicana entre los años 2000 y 2003, es una destacada hotelera  y dirigente de la Asociación Turística de Haití que fue convocada por Martelli para que se encargara de crear una estructura que lance a Haití como gran destino del turismo.

Balmir tiene una plataforma clara y trabaja dieciséis horas diarias. Su criterio  es que se deben crear eventos que atraigan cultural e históricamente tanto a la diáspora haitiana como a los extranjeros que deseen disfrutar de una cultura auténtica y distinta.

La Ministra refiere que se están creando diez destinos con una unidad de gestión, cada uno para que los turistas puedan disfrutar de las diversas ofertas paisajísticas, culturales, gastronómicas y de experiencias vitales, y hacerlo con seguridad, hospedándose  en habitaciones hoteleras con  estándares internacionales.

Zoom

La celebración

¿Por qué el carnaval?

El Consejo de Ministros  acogió la propuesta del  presidente de Haití, Michel Martelly, de declarar  tres días festivos para retomar el Carnaval de las Flores, tras más de diez años sin ser celebrado debido a las circunstancias políticas y las tragedias naturales. El presidente acogió el montaje como a iniciativa de la ministra de Turismo, Stephanie Balmir Villadrium.

La visita

La presencia de la prensa dominicana fue coordinada entre la ministra de Turismo, Stephanie Balmir Villadrium, y  Denisse Reyes, enlace de la ministra en República Dominicana. Balmir, quien fue  formada en Hotelería en nuestro país, dirige la Asociación Turística de Haití.

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