Carnes suben por alza de insumos

Carnes suben por alza de insumos

El nuevo presidente de la Junta Agroempresarial Dominicana, JAD, Wilfredo Bautista, atribuyó ayer los altos precios de los huevos, el pollo y la carne de cerdo, a las alzas de los insumos que usan y al incremento de la prima del dólar.

Dijo, además, que en el 2001, la tonelada de soya costaba US$200 en el mercado internacional y que ahora se cotiza a US$400, lo que significa un aumento de un 100 por ciento.

Agregó que la tonelada de maíz se vendía en el 2001 a US$105 y que en la actualidad se vende a US$175, lo que quiere decir que registró un incremento de un 66 por ciento.

Indicó que estos productos tienen precios históricamente muy altos y que en el caso del maíz, en 1996 registró el precio mas alto, y actualmente es la harina de soya.

Dijo que los productores avícolas y porcinos se preocupan por los altos precios a que les están llegando los huevos y las carnes de pollo, cerdo y res a los consumidores, pero que la razón principal es el aumento del maíz y de la harina de soya en los Estados Unidos.

Bautista, quien habló en nombre de los avicultores, expresó que el consumo de pollo ha bajado en un 16.66 por ciento, al disminuir de 12 a 10 millones de unidades por mes.

Para evitar que continúen aumentando los precios de los huevos y las carnes de pollo y cerdo, Bautista propuso a las autoridades que estabilicen la tasa del dólar, lancen un programa de siembra de maíz y sorgo y eliminen los impuestos, tasas y comisiones a las importaciones de los insumos que se usan para esas producciones.

Señaló que esos precios son fruto de que los inventarios mundiales de maíz son los más bajos en 30 años, pese a que los Estados Unidos registró una cosecha récord el año pasado.

Además, citó la demanda asiática, sobre todo de China y el aumento del consumo doméstico en Estados Unidos, así como los bajos rendimientos en la cosecha de soya en ese país y en Brasil.

Bautista manifestó que otro ingrediente importante en la alimentación animal es la grasa amarilla, la cual también ha aumentado su precio a niveles nunca antes vistos.

El presidente de la JAD expresó que los productores dominicanos dejan constancia de esta realidad ajena a su deseo de ofrecer estos productos (huevos y carnes de pollo y cerdo) a los precios más asequibles para el consumidor.

Dijo que los productores lamentan esta situación que se unió con los aumentos que ya había provocado la crisis del sector financiero y la consecuente devaluación del peso.

“No hemos estado ajenos a los aumentos de los combustibles, energía eléctrica, sistema de seguridad social, transporte de materias primas, etcétera», añadió.

En una rueda de prensa en que habló el presidente de la JAD, también participaron Enriquillo Rivas, consultor avícola; José López, asesor avícola del Poder Ejecutivo y Wilfredo Ferreira, productor de pollo de Licey.

Bautista también exhortó a los dirigentes políticos a documentarse adecuadamente de la realidad del subsector pecuario, a fin de planificar sus programas de gobierno y ofrecer cosas que sean alcanzables desde el poder.

Agregó que en ese sentido, las instituciones que los representan, pueden brindar informaciones actualizadas a los dirigentes políticos.

Dijo que los productores pecuarios confían que la estabilidad macroeconómica en camino no se detendrá en este proceso electoral y que esperan que las cosechas de cereales de este año sean exitosas, para ver descender los costos de producción y que los productos lleguen a más bajos precios a los consumidores.

El nuevo presidente de la JAD dijo que los productores de pollos, cerdos y reses, sugieren al gobierno poner en práctica un conjunto de medidas destinadas a reducir los precios al consumidor, como forma de hacerlos asequibles a la mayoría de la población que en la actualidad está en dificultades económicas para comprarlos.

Dijo que entre esas medidas figuran hacer un esfuerzo para bajar la prima del dólar y estabilizarla, implementar un programa nacional de siembra masiva de maíz y sorgo, buscar la reducción de las importaciones de maíz y soya y eliminar todo tipo de recargos, impuestos, tasas, comisión o gravámenes que afecten las importaciones de los insumos que usa la industria pecuaria local.

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