Carretera peligrosa
Es una vía moderna y
costosa, pero genera quejas

<STRONG>Carretera peligrosa<BR></STRONG>Es una vía moderna y <BR>costosa, pero genera quejas

GONZALO, Sabana Grande de Boyá.  Dos rústicas y pequeñas cruces de madera colocadas a la orilla de la carretera es la única señal del fatídico accidente de tránsito en el que murieron Lucas Torres y Modesto Aquino, impactados por una yipeta que circulaba a excesiva velocidad. Estas cruces, distintivo inequívoco de que ambos eran cristianos, es el único indicio de tragedia en la carretera Santo Domingo-Samaná.

No hay más cruces señalando lugares donde han fallecido más personas en accidentes de tránsito, a lo largo de 120 kilómetros, aunque la lista es larga. Entre las víctimas figura Quilvio Cabrera, quien murió el 13 de abril de 2008, cerca de allí, un mes antes de que la motocicleta en que viajaban Lucas y Modesto fuera embestida en un cruce que, en ese momento, no tenía señalización. Los residentes de Gonzalo, iracundos, reaccionaron destruyendo parte de la  vía.

El balance de accidentes en la carretera Santo Domingo-Samaná, que lleva el nombre del Papa Juan Pablo II, es trágico. Numerosos accidentes, atribuidos a imprudencias de conductores que manejan a excesiva velocidad, a la presencia en la vía de animales, y a fallas de construcción, han generado muertos y heridos. Alrededor de 20 personas han fallecido por esas causas.

Las quejas abruman

Los conductores pegan el grito al cielo desde que pagan en el primer peaje. “Ustedes están robando”, le dice el conductor de un camión, dirigiéndose a la empleada que cobra su dinero, le pasa el boleto y no se inmuta. “Son unos abusadores, y el Gobierno es más malo todavía, que lo permite”, añade el malhumorado conductor de una yipeta.

Otras quejas matizan el trayecto

Los dueños de fincas ganaderas y propiedades viven irritados porque no les permiten acceso a sus predios. “No nos dejan cruzar las vacas de un lado a otro. Si abrimos un camino, ellos vienen con guardaespaldas y lo cierran”, dice Miguel Batista, de la comunidad Aguas Vivas, en Monte Plata.

Los cruces de algunas pequeñas localidades no han sido señalizados. No se permite a los lugareños instalar puestos de expendio de víveres, frutas, carne, gallinas, ni ninguna otra mercancía. Tampoco hay paradores. Solo funciona La Plaza Turística Don Francisco, a pocos metros de cruzar el peaje de la comunidad de Guaraguao.

“Yo vivo de esta carretera y no debo hacer críticas. Pero la gente que se detiene aquí se queja mucho por el alto costo del peaje. Esa es la verdad”, comenta Francisco Cabrera, propietario del negocio.

La carretera Santo Domingo-Samaná es moderna, cara, peligrosa y acorta la ruta del viaje. Con resabios cotidianos al momento de pagar peaje, miles de conductores siguen pagando un altísimo costo por los servicios viales. Pero pagan el precio y se resignan. Sin embargo, a lo largo del trayecto, la muerte acecha, cautelosa, cualquier error o distracción de los conductores.

Servicios al usuario

1. Servicio de vigilancia con radares. Responsable: AMET. La presencia de los agentes es más notable los fines de semana. En ocasiones, durante los días laborables, no se observa este servicio a  lo largo de la carretera.

2. Hay alrededor de 600 avisos de tránsito para orientar a los conductores, 300 en ambas márgenes. Pero la mayoría los usuarios no la respetan. El límite de velocidad es de 80 Kilómetros por hora en rectas y 50 en las curvas. Hay conductores desaprensivos que rebasan hasta 160 kilómetros.

3.  Servicio de ambulancia y póliza de seguro de accidentes para los usuarios de la vía.

4. Servicio de grúa y asistencia mecánica básica.

5.  Centros de atención al usuario, que incluye refrigerios, sanitarios, comunicación, información y asistencia al viajero.

 6. Control de cargas vehicular y recaudo de peaje.

Peligro latente

Observaciones de Osiris de León, geólogo:

1. La carretera tiene peligrosas curvas  en algunos tramos, muy fuertes, impropias de una vía moderna. “Hay peligrosas curvas con muy bajo ángulo de peralte, o sin ningún peralte, y lo que es peor, a veces con un inexplicable peralte negativo que tiende a sacar el vehículo de la vía”.

2.  Se observan deflexiones (hundimientos) del pavimento en algunos tramos. Las causas son la presencia de materiales orgánicos que no fueron removidos y suelos arcillosos.

3. Autopista del Nordeste dejó promontorios en algunos tramos para  economizar el costo de cortar pequeños cerros y el costo de rellenar pequeñas depresiones topográficas.

4. Según el geólogo, hay 18 tramos peligrosos que no se resuelven con simplemente poner señales de tránsito indicando a los conductores que manejen a 50 kilómetros por hora, porque los conductores  imprudentes y temerarios no respetan esas instrucciones.

5. Además, observa que en algunos lugares ya hay derrumbes de rocas o de sedimentos arcillosos que ponen en peligro a los conductores, bloquean las canaletas de drenaje de las aguas y afectan la durabilidad de la obra.

Y estos taludes deben ser mejorados.

Zoom

Datos

1. La construcción de la vía se realizó mediante una concesión a 30 años con el Estado Dominicano. La compañía Autopista del Nordeste  invirtió US $150 millones.  El 80 por ciento de la inversión es capital privado. El Estado aportó una contrapartida de un 20 por ciento. Los trabajos se iniciaron en julio de 2002.

2. La carretera fue habilitada al público en junio de 2008 antes de la inauguración oficial, cuando todavía faltaban varios tramos por terminar. El primer tramo fue inaugurado en marzo de 2006.

3. Fue inaugurada el 15 de diciembre de 2008.  La vía fue designada con el nombre de Juan Pablo II.

4. Es el peaje más caro que se cobra en las carreteras del país. Abundan las quejas y críticas por parte de conductores. Comparado con otros, donde solo se paga 30 pesos, el de la carretera Santo Domingo-Samaná es 34.7 veces más caro, no importa si son vehículos livianos, minibuses o camiones de dos o tres ejes.

5. El ahorro de tiempo para llegar hasta el Cruce de Rincón de Molenillo es significativo, de cuatro horas aproximadamente, pues la carretera es 120 kilómetros más corta que la ruta Santo Domingo-San Francisco de Macorís-Pimentel-Nagua.

6. Se estima que el rendimiento en la vía es de 20 kilómetros por galón en el recorrido de 120 menos kilómetros, a 50 u 80 kilómetros por hora, hasta donde hay asfalto. Pero hay 60 kilómetros en mal estado de Cruce de Rincón de Molenillo a Samaná. El supuesto ahorro de combustible, calculado en RD$1,100 pesos, se paga de peaje para ir y retornar de Santo Domingo a Samaná, y viceversa.

7. Los vehículos livianos y yipetas pagan 43 pesos en el primer peaje, 139 en el segundo y 165 en el tercero, ubicado en la comunidad Guaraguao, colindante con el Parque Nacional de Los Haitises. Los camiones de dos ejes y autobuses pagan en el primer peaje RD $100; en el segundo, RD$260 y en el tercero RD $320.   Un camión de tres ejes paga RD$150 en el primer peaje, RD$480 en segundo y RD $590  en el último.

8. Del Cruce de Molenillo  a Samaná la vía está en mal estado. Equipos pesados trabajan en varios tramos. La segunda etapa será financiada por un  organismo internacional, bajo un esquema de concesión en el que el Estado no aportará recursos para la ejecución.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas