La Carta de Intención de las autoridades correspondiente a la quinta y sexta revisión  (diciembre del 2010 y marzo del 2011) revelan los excelentes resultados del programa con el FMI aplicado desde octubre del 2009, el cumplimiento de las metas fiscales (como hemos señalado en artículos precedentes) con pequeñas desviaciones originadas en el sector eléctrico, cumplimiento con holgura de las metas monetarias, así como los compromisos estructurales.

A lo largo del pasado año los economistas de la oposición jugaron con multitud de cifras sobre el déficit presupuestario, llegando a afirmar que rondaría los 70 mil millones de pesos, y por consiguiente el acuerdo con el FMI se rompería y la economía caería en serios desequilibrios. Pero los fabuladores no llegan lejos y las cifras oficiales, validadas por los técnicos del FMI y la aprobación del Directorio el pasado viernes, revelan que el Gobierno central cumplió con su meta de déficit y la pequeña desviación se originó en un mayor subsidio al sector eléctrico.

A diciembre del 2010 la meta del déficit para la administración central era de RD$44.3 mil millones (2.3% del PIB) y el déficit observado fue de RD$47.9 (2.5% del PIB), una diferencia inferior a los RD$3,700 millones (0.2%del PIB) que se originó en un incremento del subsidio al sector eléctrico, pero si usted resta ese aumento  observará que se cumplió con holgura la meta fiscal del Gobierno central. En el caso del sector público consolidado el déficit fue equivalente al 4.1% del PIB con una desviación de 0.3% también originada en el sector eléctrico.

A marzo de este año la meta del déficit era de RD$14,900 millones y el déficit observado fue de RD$16,600 para una pequeña desviación de RD$1,700 millones, cuyo origen también fue un mayor subsidio a la electricidad, mientras el balance del sector público consolidado se cumplió con una holgura de RD$1,200 millones gracias al superávit del resto del sector público.

En materia fiscal, como expresa la carta, hubo un ajuste desde la segunda mitad del 2010 y eso se expresó en dos presupuestos suplementarios dirigidos a recortar gastos para incrementar transferencias a la CDEEE, la tasa de crecimiento anualizado del gasto se redujo, y a partir del primer trimestre de este año se decretó una reducción adicional en 12%, descontando sector social y otras instituciones, permitiendo así soportar la caída de las recaudaciones en relación a lo estimado y acudiendo a medidas impositivas, como el denostado paquete, con el fin de sustentar el incremento del subsidio y no meter el país en largas tandas de apagones.

En cuando a las metas monetarias en diciembre y marzo las reservas internacionales netas se sobre-cumplieron en US$150 y US$200 millones respectivamente, también con amplios márgenes la meta de los activos internos netos del Banco Central (entre 10-25 mil millones); los datos preliminares sugieren que también se cumplieron al mes de junio, mientras en la parte de los indicadores estructurales se ejecutaron la mayoría, aunque algunas con ciertos retrasos que no afectaron el cumplimiento del programa.

Esa es una de las diferencias entre la administración del PLD y la del principal partido opositor: la presente asume con responsabilidad los compromisos, al margen de los costos políticos, y mantiene con voluntad el clima de crecimiento con estabilidad, mientras los otros, los que aspiran a volver, incumplieron todas las metas del programa con el FMI y fueron incapaces de preservar la estabilidad que recibieron de la primera administración del Dr. Leonel Fernández.