Cartas al director

Cartas al director

Señor director:

Hipólito Mejía es y será una figura de primer orden para la consolidación y la institucionalidad democrática en la República Dominicana, sea o no el candidato presidencial, continúe o no en la presidencia de la República después del 16 de agosto venidero.

Quienes dentro y fuera del PRD pretenden que se auto exilie en el zafacón de la historia, que se marginen de las grandes decisiones políticas, económicas y sociales de nuestro país, además de estar equivocados, deben despertar de ese sueño, comenzando con los restantes precandidatos de su partido, con el licenciado Hatuey Decamps a la cabeza.

)Puede marginarse o pretender marginar a una persona que, como Hipólito, puede darse el lujo de contar con el respaldo de 25 senadores, 47 diputados y diputadas, un centenar de síndicos, cientos de regidores, más del 60% de las direcciones alta y media y con más del 45% de los secretarios generales de los comités de base de su partido, el Revolucionario Dominicano -PRD-, aislarse de la actividad política en un país como el nuestro con apenas 4.5 millones de votantes y con unos 9.0 millones de habitantes?.

Pero además del respaldo que aún mantiene dentro de su partido, en este país todo el que pasa por la Presidencia de la República, por múltiples razones sale del poder granjeándose el respaldo, el afecto y el cariño de segmentos importantes que en el momento oportuno le profesarán respaldo, aunque sea por agradecimiento por la deferencia que le brindó durante su mandato.

El PPH con Hipólito a la cabeza ha sido tan satanizado, dentro y fuera del PRD, especialmente por los restantes siete precandidatos de la organización en el poder, que lo culpan hasta de los fenómenos atmosféricos que se han registrado en el país, en los últimos meses.

Otra pregunta, pero ahora para los aspirantes a la presidencia de la República, Milagros Ortiz Bosch, Rafael Suberví Bonilla, Emmanuel Esquea, Ramón Alburquerque, José Rafael Abinader, Hatuey Decamps Jiménez y demás si lo hubiese, )ganaría el PRD las elecciones del 16 de mayo venidero, sin la participación activa y militante de los dirigentes, miembros y simpatizantes, dentro y fuera del PRD del poderoso Proyecto Presidencial Hipólito?. Con una sola palabra se responde, no.

Para quien escribe, la lealtad a las amistades y a las organizaciones políticas a las que he pertenecido y pertenezco, es una especie de sacerdocio, y aunque sigo opuesto a la reelección sin excepción, aunque parezca una paradoja, una contradicción, por lealtad a Hipólito y a José Rodríguez Soldevilla, estoy montado en barco junto a ellos, y si se hunde, seré el último en lanzarse al agua.

Quienes reivindican las decenas de años militando en el PRD, deberían demostrarlo ahora, no importa que Hipólito pretende repostularse o no, que lo son de corazón, respaldando y proyectando las grandes realizaciones que en beneficio de las grandes mayorías dominicanas han hecho el Presidente Mejía y su organización, en vez de ser voceros oficiales de los enemigos tradicionales del partido blanco.

Si por Hatuey votaron en la «convención organizada por él», poco menos de 300 mil perredeístas, de acuerdo a los datos ofrecidos por sus seguidores, nos atreveríamos a vaticinar que por Hipólito, en una convención transparente, votaran mínimo, 500 mil, entonces, )se puede prescindir del jefe de Estado, cuyos seguidores superan el 30% de la matrícula de la organización oficial en futuras contiendas electorales en este país?

Señores precandidatos del PRD, todavía estamos a tiempo, deténganse ante un posible abismo. Hipólito es una realidad.

Atentamente,

Manuel Espinosa Rosario

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