Hoy 
Señor director:
Solicito a usted la publicación de un extracto de la carta dirigida al rector magnífico de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD):»A través de la presente misiva elevo a usted mi más sentida y enérgica protesta ante el acto de ilegalidad e irrespeto de que he sido víctima en la sesión extraordinaria del Consejo Directivo de la Facultad de Humanidades. En dicha reunión, el decano electo, de manera ilegal, procedió a despojarme de mi condición de directora del Instituto de Psicología.
«El señor decano propuso ratificar a dos de los directores de institutos que existen en la Facultad, curiosamente, dos de sus partidarios en la recién pasada campaña electoral, y en el caso nuestro sin previo aviso, ni justificación alguna, sustituirnos por el maestro Leonidas Heredia, director saliente de la Escuela de Psicología, quedando en evidencia que la única consideración para ello era la de cumplir con una de sus promesas electorales de repartición de cargos, como si se tratara de distribuir un botín de guerra.
«Me dirijo ante usted y a los demás miembros del Honorable Consejo Universitario para denunciar ese acto de abuso de poder y reclamar al mismo tiempo una reparación moral como corresponde, dada la trascendencia de mi labor por más de 25 años al servicio de la única institución académica a la que me he dedicado con entereza, amor y con todas mis fuerzas físicas y morales.
«Respecto a nuestro caso deseo me permita aclarar lo siguiente:
«No existe razón alguna para ser destituida que no sea la no pertenencia al grupo del decano. Más aun, no se ha evaluado ni sopesado mi labor, por la que hemos recibido siete reconocimientos universitarios durante mis atribuciones como directora del Instituto de Psicología. No se tomó en consideración nuestros aportes al desarrollo de la psicología dominicana, ni la dedicación que hiciera sentir la presencia orientadora de la Universidad Autónoma de Santo Domingo de manera permanente ante problemas psicosociales que nos agobian. Entre nuestros logros, se pueden mencionar con toda humildad: la publicación de cinco volúmenes de Perspectivas Psicológicas, la única revista del país de calidad científica en psicología, editada bajo nuestra dirección durante los últimos cinco años, que hoy, con mucho orgullo, podemos mostrar en las Ferias Nacionales del libro y en todas las bibliotecas del país. Hemos dirigido proyectos de investigación de relevancia social, tales como Deserción en la Educación Superior Pública en República Dominicana, estudio realizado para la UNESCO y publicado en el Internet por el Instituto de Estudios Superiores de América Latina y el Caribe (IESALC); la investigación «Conocimientos, Creencias, Actitudes y Prácticas Sexuales relevantes al VIH/SIDA e Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) en el Personal de la Policía Nacional (2004), realizada para el PNUD y el COPRESIDA. Los estudios realizados sobre la Violencia y el Homicidio publicados en libros, revistas, diarios periodísticos y espacios en la Web. «Dos estudios para la creación de una Escala de Evaluación de Rasgos Delictivos en Portadores de Armas de Fuego, destinados para el uso de la Secretaría de Estado de Interior y Policía en años anteriores, y que hoy es utilizado por instituciones públicas como instrumento de evaluación de la personalidad. El Estudio sobre la situación de la Carrera de Psicología en la UASD, entre otros tantos más. Cabe mencionar nuestro papel como coordinadores por la UASD, del apoyo psicológico necesario brindando a los afectados por la tragedia de Jimaní, para enfrentar los graves problemas psicológicos que se originaron. Mantenemos actualmente amplias relaciones internacionales con grupos de psicólogos y académicos prestigiosos, y con otros instituciones de investigación, quienes hoy día están muy alarmados por la situación que padecemos y nos han expresado por escrito su solidaridad. Somos parte, además, del consejo editorial de la Revista Avances en Psicología Latinoamericana y de Pserinfo (revista digital) publicadas en el extranjero.
Quiero señalar que es ilegal e improcedente mi destitución como directora del Instituto de Psicología por el Consejo Directivo de la Facultad, ya que fui designada por el Honorable Consejo Universitario bajo la resolución No.99-008 del 15 de enero de 1999, basada en la resolución No.19-98 de la Comisión de Asuntos de Investigación y Postgrado del Honorable Consejo Universitario de fecha 11-9-98, cumpliendo todos los requisitos para la creación de un instituto, por lo tanto, sólo el Consejo Universitario tiene la facultad para revocar mi nombramiento o mi sustitución.
«Quiero dejar bien claro que no estoy, bajo ningún concepto, «aferrada al cargo» ni a ninguna posición que no me pudiese ganar con mi esfuerzo y mi desempeño, pues la vagancia no ha sido mi norte, mucho menos el clientelismo. Por ello reclamo la debida justicia, el respeto a mi dignidad como mujer y como académica que lo merezco, dotes que pareciera se van perdiendo en la UASD.
«Apelo ante usted y a las decisiones de conciencia del Honorable Consejo Universitario, como máxima autoridad en la universidad, para que se descontinúe irrespetando nuestros derechos ganados en buena lid con mucho esfuerzo, durante tantos años de servicio y dedicación a esta universidad.
«En sus manos está reparar el agravio del que he sido objeto.
«Con todo el respeto que su alta investidura me merece y confiada en que no permitirá se continúe con este atropello. Se despide,
Muy atentamente,
Doctora Mayra Brea de Cabral
Directora del Instituto de Psicología de la UASD
