Señor director:
En vista de los diferentes comentarios que han surgido en los últimos días en relación al partido Alianza Por la Democracia (APD) y especialmente sobre la figura del secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales y presidente además de la APD, el doctor Max Puig, quisiera permitirme compartir con usted y sus lectores algunas precisiones sobre el tema en cuestión.

En primer lugar quisiera destacar que la Alianza Por la Democracia, a raíz de su primer congreso 2002-2003 definió bien claro entre otros puntos lo que seria su política de construcción partidaria; en aquella ocasión al igual que ahora teníamos bien definido que los partidos políticos modernos se construyen a partir de una propuesta diferente, integradora, con participación y sobre todo, que esto solo es posible a partir de un proceso sistemático y continuo que se va construyendo en todo momento, día a día, minuto a minuto. Como muestra de esto nuestra exitosa participación en las pasadas elecciones, que nos colocó como la quinta fuerza política en la República Dominicana, gracias al reconocimiento de la sociedad y del trabajo tesonero de todos los hombres y mujeres de la APD, que creemos en que es posible el surgimiento de una fuerza política diferente.

Traigo esto a colación a partir de algunas opiniones que para nada se corresponden con la verdad. He escuchado con mucha tristeza algunos comentarios de personas que desde mi lógica no entienden para nada lo que implica la construcción de un partido político diferente inspirado en principio y valores democráticos y que por ende no asimilan que es posible una conducta diferente en el escenario político nacional.

A la Alianza por la Democracia le ha tocado ser parte del gobierno del doctor Fernández y ha confiado en el doctor Max Puig para que dirija una de las posiciones en que emerge una gran cantidad de intereses, como lo es la Secretaría de Medio Ambiente. El doctor Puig ha sido sumamente cauteloso y tiene bien claro lo que implica dirigir una cartera de esa magnitud, pese a la presiones de algunos sectores.

Pero más claro tenemos aún, y de ahí mi repuesta a los que plantean que la APD se está construyendo valiéndose de su posición en la secretaría de Medio Ambiente. A los que así piensan hay que decirles que están totalmente equivocados; en primer lugar, porque los partidos político no se construyen a partir de posiciones públicas ni mucho meno estimulando el clientelismo y el paternalismo; esas son acciones estériles que solo tienen un efecto coyuntural y momentáneo y que para nada sirve para la construcción de un proyecto político con perspectiva de poder.

En segundo lugar, porque sabemos que si queremos ser diferentes debe de haber una coherencia entre lo que decimos y lo que hacemos, y esa coherencia está de manifiesta en todos y cada uno de los que nos sentimos apedeistas, ya que desde su nacimiento la APD ha expresado su voluntad de contribuir a una sociedad más justa, más humana y sobre todo más participativa, y si actuásemos de otra manera seria actuar en contra de los principios y valores que forman la bandera que enarbolamos.

De manera pues, que apoyamos las acciones que está desarrollando el doctor Max Puig al frente de la Secretaría de Medio Ambiente, y a los que nos adversan que les quede bien claro que seguiremos creciendo, simplemente haciendo lo que desde nuestro nacimiento hemos venido haciendo formando parte o no del gobierno, que no es más que construir un partido con una propuesta diferente, integradora y sobre todo democrática.

Atentamente,

Pablo Vicente