CARTAS AL DIRECTOR
La UASD

CARTAS AL DIRECTOR<BR> La UASD

Señor director:
A éste histórico patrimonio nacional siempre se le ha valorado como la gran antorcha de la sapiencia pública superior, por sus posturas críticas, abiertas y pluralistas. La calificamos como un gran tesoro. Es decir, que para quienes hemos probado su miel, nos sentimos preparados para encarar los retos de la vida. Gracias a las contínuas innovaciones que ha venido experimentando a partir del histórico movimiento renovador postrujillista que revolucionó su sólida institucionalidad, a favor de las mejores causas.

La Universidad Autónoma de Santo Domingo no es sólo una academia pública de estudios superiores, es además, un gigante laboratorio capaz de arrojar respuestas efectivas a los grandes problemas nacionales, a través de sus estructuras orgánicas oficialmente representadas por su honorable Consejo Universitario. Su rol también tiene que ser protagónico de cara al debate nacional en busca de soluciones pertinentes que justifiquen su existencia más allá de la rutina académica.

Estamos completamente seguro de que la UASD administra científicamente todas las fórmulas claves que ha venido demandando la sociedad, a través de los críticos índices socioeconómicos que han venido alterando la paz a la mayoría de dominicanos.

La UASD debe trascender sus linderos con impactos como los que sólo ella es capaz de provocar, despejando conflictos y construyendo la plataforma de un Plan Nacional de Desarrollo. Al margen de los famosos «diálogos» nacionales que nada positivo han arrojado al país.

A la UASD hay que explotarla al máximo con la racionalidad que su fortaleza exhibe. Hay que exponerla al análisis, al debate y ponerla al frente de los principales flagelos que engendran la criminalidad, a través de sus diferentes modalidades.

Un rector con los dotes de Roberto Reyna, maestro, líder y gerente es capaz de asumir el reto de volcar a la UASD de frente al foro nacional, carente del soporte científico que demanda nuestra circunstancia política en estos momentos de múltiples crisis.

Roberto Reyna puede ser a partir del próximo año el exponente más idóneo para desde la UASD coordinar una gran cruzada que coadyuve con los planes del gobierno, en su afán de reorientar las instituciones y estabilizar los parámetros macroeconómicos que demanda el país.

En consecuencia, confiamos que con el comprobado despliegue de la multifacética hoja de servicio del maestro Reyna, en la academia podamos impulsar todos los mecanismos que lo coronen como el rector consensuado de la mayoría de fuerzas que los apuntalan como triunfador en la primera vuelta del próximo febrero 15 del año 2005.

Atentamente,
Ramón B. Ramírez Vásquez.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas