Señor director:
Santiago Martínez es un profesional de la educación muy honesto y capaz y puedo dar fiel testimonio, pues nuestra relación como colega data de muchos años. Cuando me inicié en la Honduras en el año 1973 ya laboraba en la escuela como maestro, luego asumió la subdirección, siendo el director Enrique Ferreras Espinosa, un profesor muy humano y sin los títulos rimbombantes que actualmente mucho utilizan, tan solo para echar aguaje. Cuando lo jubilaron, Santiago asumió la dirección y en el último gobierno del doctor Joaquín Balaguer fue ascendido a director 15-02. Los puestos desempeñados por este profesional son por escalafón y méritos acumulados, al margen de la política partidista.

Su desgracia se inició en el pasado gobierno del PLD, pues para nadie es secreto que en el difícil arte de gobernar los peledeistas son la panacea y con nadie que no sea de su grupo puedan compartir el poder. En la gestión de la licenciada Ligia Amada Melo lo sustituyeron por un subalterno y lo mandaron a su casa con una pensión miserable, para que se muriera de hambre con su familia. En la gestión  de la doctora Milagros ortiz B. solicita su reingreso al sistema educativo y lo reivindican como director del Distrito 15-03 y muchos testimonian que hizo un trabajo excelente.

Finalizando este gobierno solicitó su pensión por edad y años en servicios. El presidente actual en su derecho dispone una revisión de las listas de pensionados y jubilados y tamaña sorpresa una caterva aparecen cancelados y degradados en franca violación a la ley. El aludido no cobró el cheque pírrico que le salió como técnico de Distrito. Lo mismo ocurrió a otros profesionales pero la peor sanción la recibieron quienes fueron enviados a las escuelas a impartir docencia y quienes no cobraron porque están cancelados. Ningún  profesional que se respete acepta esos abusos, pues los estamentos de educación no son fabricas, cuyos dueños votan a los obreros cuando quieren.

Reitera la Secretaría que no ha cancelado ni degradado a nadie, entonces la situación  es grave porque alguien esta mintiendo y no son los afectados(as). Parece ser son su más cercanos colaboradores y están violando la circular número 54 firmada por ella, lo cual evidencia una crisis de autoridad. Los puestos han descontrolados a los profesores peledeístas, licenciados en ciencia oculta la ciencia de la maldad y no es para menos, pues son seres frustrados, resentidos y vengativos que ignoran la relevancia de ser maestro, lo cual es lamentable en esta etapa difícil que vive nuestro país.

Siento nostalgia de un inquieto dirigente de la Seccional Oeste de ADP, que acusaba a la doctora Milagros Ortiz B. de arrabalizar la cartera educativa. ¿dónde estará?, porque ahora necesitamos defensores auténticos, pues los distritos y regionales se están llenando de arrabaleros bellacos y enemigos de la humanidad. Algunos tienen expedientes tan feos y largos, «que un chivo azuano no lo puede brincar», y son tan cara dura que quieren humillar a maestros como el licenciado Santiago Martínez y otros.

Con humildad pido a la Secretaria formar un equipo de profesionales serios y revisar las jubilaciones y pensiones con la ley en mano y por favor meta en cintura a sus partidarios, pues las ignominias en educación restan simpatías. Finalmente le digo a los abusados que cuentan con mi apoyo y solidaridad. Quienes me conocen saben que no tolero las injusticias y que por mis colegas me la juego.

Atentamente,

Lic. Teresa Gómez

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Nuevo Código

Señor director:

En el Nuevo Código Procesal Penal al Ministerio Público se le encarga la dirección, de modo que pueda presentar la acusación; obtener la autorización para acusar en juicio y sostenerla en base a pruebas idóneas, lícitas y pertinentes.

El Ministerio Público debe tener muy presente que sin bien es cierto que el 80% de las pruebas se encuentra en el lugar de los hechos no menos cierto es que estas no pueden estar viciadas al momento de presentarse ante un juez, a fin de establecer lícitamente la certeza de un hecho.

El fiscal debe tener presente y manejar las técnicas de administración de la prueba como son: protección del escenario, levantamiento de las evidencias y la cadena de custodia a la hora de realizar una verdadera investigación. La prueba puede ser material (real e ilustrativa), documental y científica.

La dirección funcional no implica que los fiscales sustituyan ni anulen a los técnicos policiales, sino que coordinando con estos puedan articular acusaciones exitosas a fin de que los verdaderos delincuentes no se paseen por las calles como amos y señores.

La labor de la investigación es una labor de equipo y trabajo en conjunto y armonía.

El Ministerio Público de nuestro país está trabajando las 24 horas del día. Se está fortaleciendo y profesionalizando, ya que el Nuevo Código Procesal Penal le da n carácter protagónico al representante de la sociedad en proyección al perfil que requerirá de este funcionamiento el nuevo sistema acusatorio adversaria.

Atentamente,