CARTAS AL DIRECTOR
No a los insultos

CARTAS AL DIRECTOR <BR>No a los insultos

Señor director:

No digas mentiras, di la verdad y la verdad os hará libres.
No mientas; los mentirosos no entran al reino de Dios.
No insultes al esposo, trata de decirle con palabras suaves.
No insultes a la esposa, acuérdate cuando la viste por primera vez, cuántas cosas bonitas le dijiste.
No insultes a tus hijos e hijas, nietos, elógiales en sus tareas.
No insultes al vecino o vecina, mucho menos a los hijos de ellos; en el momento del corre-corre ellos están primeros; trátalos como amigos y los resultados serán buenos.
No insultes a los de la guagua del colegio; los tuyos serían los últimos en llegar a casa.
No insultes al maestro o maestra, no sea que en la nota esté la respuesta.
No insulte a los alumnos; mejor diles que la patria los espera bien formados.
No insultes a tu jefe o jefa; debes recordar que son superiores; en su respuesta puede estar tu despedida.
No insultes a tu secretaria, no sea que los secretos queden al descubierto.
No insultes al chofer o ayudante, no sea que jamás te puedas montar.
No insultes al pasajero o pasajera; lo más probable es que tengas que verlo todos los días.
No insultes al colmadero o colmadera; se da el caso de que lo que buscas sólo él lo tiene.
No insultes al cliente; se va y no te paga; además el cliente siempre tiene la razón.
No insultes al perro, que te confunde con un hueso.
No insultes en oficinas públicas, puede que te cobren los dichos en las facturas.
No insultes cuando estés en un hospital, no sea que cuando tengas que volver no tengas cama.
No insultes al mecánico, no sea que sea él quien conozca el fallo.
No insultes al plomero, no sea que él sea quien sabe por dónde están todas las tuberías.
No insultes a la cajera o cajero, no sea que te cobre en la registradora.
No insultes a los que recogen basura; los resultados son dejarla.
No insultes al vendedor o vendedora de la calle, no sea que cambie de calle.
No insultes al discjockey; jamás te pondrá la música que tú pides o te gusta.
No insultes al camarógrafo; la imagen tuya sería la peor.
No insultes al abogado; te puede caer un expediente.
No insultes al policía; puede que te meta en la última celda.
No insultes al piloto; puede que te vea cara de terrorista.
No insultes al farmacéutico, no sea que se le cambien los medicamentos y aplique para insectos.
No insultes al bombero; en vez de agua te echaría aire para que ardas más.
No insultes al líder, que si algún día gana te cobra un por ciento muy alto.
No insultes al ebanista, puede que termines comprando un ataúd.
No insultes a la persona de servicio en la casa; el resultado es dejar una puerta a medio cerrar o el día que tiene visitas no va.
No insultes al que te debe; te solicitó como un angelito y para pagarte se vuelve un demonio.
No insultes al que atiende 1a gasolinera, que si le pides gasolina te echa gasoil.
No insultes al repartidor de leche; la tuya sería la última.
No insultes al juguero; te vende el vaso medio.
No insultes al dentista, no sea que de coraje, al pedirle que te saque una muela, al mismo tiempo te saque la lengua.
No insultes al heladero; puede que te diga que todos están descongelados.
No insultes a papá o a mamá, estarías insultando tu mismo ser.
No insultes a tu yerno o yerna; en lugar de hijo/hija lo has puesto.

Y en fin no insultes a nadie.

Atentamente,

 

 

Publicaciones Relacionadas

Más leídas