Señor director:
En el almuerzo semanal de los medios de comunicación del Grupo Corripio, reseñado por Hoy, en su edición del pasado jueves 30 de septiembre del presente año, en la página 11, se publica una información que merece algunas precisiones.

En efecto, bajo la firma de Leonora Ramírez se lee lo siguiente: «A la Finjus se la pusieron dura, pues Domingo del Pilar, jefe de redacción de El Nacional, le preguntó a la Medina si esa Institución era receptáculo de lo mejor del país o puente para ascenso social y profesional. Es que… Milton Ray Guevara, ex -Secretario de Trabajo, ocupó el mismo cargo, igual que Francisco Domínguez Brito, actual Procurador General».

A mi entender, la pregunta de Domingo del Pilar fue muy apropiada y oportuna. Sin embargo, parece que no obtuvo respuesta de la doctora Fabiola Medina, o la misma careció de interés noticioso, o no convenía su reseña.

Por esta razón y para edificar a los lectores de Hoy, me permito señalar lo siguiente:

1. El doctor Francisco Domínguez Brito fue escogido como director ejecutivo de la Finjus, después de una exitosa gestión como procurador fiscal del Distrito Nacional y una destacada actividad profesional, luego de ingentes esfuerzos desplegados para convencerlo por parte del licenciado Carlos Guillermo León, bajo cuya presidencia, la Fundación alcanzó extraordinarios niveles de presencia, eficiencia, organización y prestigio. Como es de conocimiento general, el doctor Domínguez Brito, al salir de la Finjus, se dedicó al ejercicio privado y a sus actividades políticas hasta ser designado procurador general de la República el 16 de agosto de este año.

2. Por nuestra parte, participamos en la creación de la Finjus el 23 de julio de 1990, después de haber desempeñado las funciones públicas de Secretario de Estado sin Cartera, colaborador director del presidente Antonio Guzmán (1978-1981), cónsul general en New York (1981-1982), y embajador extraordinario y plenipotenciario en Francia, concurrente en el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, Reino de Bélgica, Comunidad Económica Europea y República Federal de Yugoslavia (1982-1986). En el ámbito privado, me desempeñaba como consultor jurídico del Grupo Financiero Popular y director de la Escuela de Ciencias Jurídicas de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), Recinto Santo Tomás de Aquino.

A la Fundación Institucionalidad y Justicia, Inc., le puse nombre, diseñé su logro, redacté sus estatutos y la dirigí durante seis años, casi honoríficamente, con un modesto presupuesto que prácticamente no varió. Justo es reconocer, que recibí en todo momento un vibrante apoyo del excelente Consejo de Directores encabezado por el ilustre jurista y ciudadano doctor Manuel Bergés Chupani, y contribuimos de manera decisiva para lograr la reforma judicial de 1994. Cuando salí de la Finjus, lo hice para desarrollar mis actividades profesionales y participar en la política, no para ocupar puesto alguno. Mi designación en la Secretaría de Estado de Trabajo, se produce siendo senador por la Provincia de Samaná, curul obtenida con el 51.9% de los votos, en 1998.

Mi interés, señor director, con esta misiva, es sencillamente recordar los hechos como acontecieron; aunque algunas personas pretendan borrar mi paso por la Finjus, no lo lograrán!

En cuanto al doctor Domínguez Brito, consideré de justicia mencionarlo porque conozco su caso.

Espero, señor director y amigo, que esta carta sea publicada íntegramente para beneficio de su legión de lectores y por el debido respeto a mis derechos ciudadanos.

Doctor Milton Ray Guevara,
Miembro Fundador de la Finjus y primer director ejecutivo.