Cartas
Elogia a MVP

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El Ministerio Público, cuyo máximo representante es el Procurador de la República, puede actuar de oficio o ha petición de partes para poner en movimiento la acción pública, cuando se producen denuncias graves sobre actos de corrupción o cualquier hecho punible.

Hemos visto con asombro que los representantes de la sociedad que son el Procurador General de la República y los fiscales de las distintas jurisdicciones han guardado silencio frente a las afirmaciones de algunos funcionarios del gobierno del PLD en el sentido de que la corrupción permea todos los estamentos del tren estatal.

He aquí la cronología de los funcionarios del gobierno y de otros sectores que han coincidido en que los incircumbentes de los altos puestos de la administración pública se están enriqueciendo con el dinero del Estado:

1.- El doctor José Joaquín Bidó Medina, presidente del Comité de Etica del Gobierno, se quejó de que el Ministerio Público no le ha dado curso a varios expedientes que el organismo presidido por él depósito en el Departamento de Prevención y Lucha contra la Corrupción, organismo adscrito a la Procuraduría General de la República.

2.- El licenciado Miguel Cocco, director general de Aduanas, atacó el enriquecimiento ilícito de los funcionarios públicos, admitiendo que la sociedad en su conjunto está obligada a ponerle un alto a la corrupción.

Cocco dijo que los pocos recursos de que dispone el Estado han sido pésimamente administrados, lo que ha permitido que los funcionarios públicos de todos los niveles y categorías emprendan una competencia absurda por ver cómo se acumula más riquezas, si por medio de la plusvalía o a través del robo al Estado.

Cocco enfatizó que se ha convertido en un hecho cotidiano ver cómo funcionarios se transforman en millonarios, lo que aleja cada vez más la posibilidad de que los pobres superen el estado de miseria e indigencia en que viven.

Esta denuncia no proviene de ningún pelafustán, sino de una persona con autoridad moral y con una hoja de servicios al país, desde la izquierda dominicana, cuando se luchaba por instaurar un clima de libertad y democracia.

3.- El doctor Antonio Isa Conde, asesor del Poder Ejecutivo, condenó la dilapidación de recursos en esta administración peledeísta y se quejó de que no se le está dando estricto cumplimiento a la ley de austeridad ni a las normas para las contrataciones públicas.

4.- El licenciado César Nicolás Penson, miembro de la Junta Monetaria, fustigó duramente los actos de corrupción que vienen cometiendo altos funcionarios del gobierno que preside el doctor Leonel Fernández, candidato a la reelección presidencial, y pidió una investigación para poner cese a esta nociva práctica.

5.- El presidente de la Suprema Corte de Justicia, doctor Jorge Subero Isa, resaltó que se aprecia un desmedido afán de lucro entre los funcionarios de alto nivel. También se expresaron en esos términos los empresarios Jorge Vilalta e Ignacio Méndez, integrantes del Consejo de los pasados presidentes de la Asociación de Industriales de Herrera.

6.- El presidente de la Conferencia del Episcopado Dominicano, el Arzobispo Ramón Benito de la Rosa Carpio, planteó que históricamente se ha demostrado que la peor corrupción es la de los dirigentes políticos nombrados en posiciones del gobierno y declaró que el país debe ponerle atención a las denuncias de corrupción.

7.- La Fundación Institucionalidad y Justicia (FINJUS), deploró que la corrupción no esté siendo castigada en el sistema judicial de la República Dominicana y advirtió que se está atentando y debilitando las instituciones sobre las cuales se sustenta la democracia.

Con este vendaval de afirmaciones y denuncias, el Ministerio Público ha exhibido una inercia preocupante e indignante, renegando su papel de representante de la sociedad en el Poder Judicial.

Hay un principio jurídico que dice que el fraude lo corrompe todo y nosotros añadimos que la reelección pudre todo lo que toca y en el futuro inmediato veremos los escándalos de corrupción que alarmarán a la sociedad por el deseo del presidente Fernández de quedarse con el poder.

Hace falta la voluntad del procurador general de la República o cualquier instancia del Ministerio Público para que inicie la persecución de aquellas personas que están sustrayendo los dineros públicos de las arcas del Estado.

La población dominicana tiene una gran esperanza en el candidato presidencial del PRD, ingeniero Miguel Vargas Maldonado, cuando asuma la dirección de la cosa pública tras ganar las elecciones venideras de manera limpia en la primera vuelta electoral.

Atentamente,
Hugo A. Ysalguez

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