Cartas
Reelección

<p><strong>Cartas<br/></strong>Reelección</p>

Señor director:
El artículo 49 de la Constitución dominicana plantea que “El Presidente de la República podrá optar por un segundo y único período constitucional consecutivo, no pudiendo postularse jamás para el mismo cargo, ni a la Vicepresidencia de la República”.

La modificación del artículo 49 de nuestra carta sustantiva vino a satisfacer el afán continuista del ex-presidente Hipólito Mejía y también le abrió la oportunidad al doctor Leonel Fernández para que pueda aspirar a un segundo mandato consecutivo. Pero también esa brecha ha colocado al Partido de la Liberación en su peor situación interna de la última década.

Ahora bien, históricamente la reelección ha sido una de las causas principales de los males que ha tenido nuestro país. Balaguer la impuso a través del fraude, muerte, corrupción y represión. El ex-presidente Hipólito Mejía Domínguez trató de imponerla a través de la corrupción y el abuso de poder.

Tan funesta es la reelección presidencial, que el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional firmado por el ex-presidente Hipólito Mejía, no pudo cumplirse porque las metas fiscales del gobierno fueron violentadas por el exceso del gasto en la campaña reeleccionista de ese gobierno.

La frágil estabilidad macroeconómica del gobierno del doctor Leonel Fernández se debe fundamentalmente al programa de ajuste que el gobierno viene aplicando a instancia del Fondo Monetario Internacional, lo cual ha traído confianza a los organismos internacionales y nacionales. Ahora bien esa fragilidad se puso en evidencia en los primeros cinco meses del año cuando el gobierno por tener mayoría en el Congreso Nacional incurrió en una política excesiva de gasto que dejó en un limbo el acuerdo con el FMI, obligando a las autoridades a paralizar el programa de inversiones públicas a excepción del Metro de Santo Domingo.

El actual acuerdo que se está negociando con FMI, durará solo hasta el año 2007. ¿Se imaginan ustedes una campaña reeleccionista en medio de una frágil estabilidad macroeconómica y sin que el gobierno esté amarrado a un acuerdo con el FMI?

Históricamente la reelección presidencial en nuestro país ha sido funesta y solo ha sido posible imponerla ante la débil institucionalidad democrática, recurriendo a lo peor de todo, avasallando, golpeando, corrompiendo, violentando leyes, intimidando, chantajeando y sobre todo destruyendo las instituciones democráticas. Si ese es el camino que desea recorrer el presidente Leonel Fernández que lo haga; la historia lo juzgará.

Atentamente,

Lic. Oliver Aquino
Profesor de la Universidad ITECO

Director de Comunicación de la Asociación de Profesores del ITECO.

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