Hoy 
La noche del 2 de julio del año que transcurre, el director general del Instituto Dominicano de Aviación Civil (IDAC), licenciado Norge Botello, le hizo entrega al Presidente de la República, doctor Leonel Fernández Reyna, en el Palacio Nacional, la clasificación que acredita que todas las aeronaves con matrícula dominicana puedan operar comercialmente hacia Estados Unidos, después de 14 años de impedimento. Quien entrega dicha documentación es la Administración Federal de Aviación de los Estados Unidos (FAA) a través del encargado de Negocios de la embajada de dicho país, al licenciado Botello.
Decía José Martí, prócer de Cuba, «no hay hombre más grande que aquel que cumpla con su deber», el director del IDAC siempre tuvo como principal tarea llevar al país como categoría uno; y para lograr dicho objetivo puso en marcha un plan estratégico y táctico que cambió de la ley 505 sobre Aviación Civil por la Ley 491-06 creando así el Instituto Dominicano de Aviación Civil, pero al mismo tiempo se venían capacitando técnicos profesionalmente, creando reglamentos, la composición de autoridad de aviación civil, funciones de la vigilancia de la seguridad, orientaciones técnicas, otorgamiento de licencias y certificaciones; para así dar fiel cumplimiento a la aspiración anheladas del pueblo dominicano.
La República Dominicana ya logró su categoría uno y actualmente ocupa la vicepresidencia del Consejo de la Comisión Latino Americana de Aviación Civil (CLAC) y la vez, fruto de esa confianza, hoy nuestro país va con seguridad a consolidarse como uno más del conjunto de países con prestigio mundial en la aviación civil, y para eso ya tiene otro objetivo que es ocupar un asiento en el Consejo de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) el próximo año en Montreal, Canadá.
El profesor Juan Bosch, maestro y gloria nacional de la patria de Juan Pablo Duarte, calificó al licenciado Norge Botello como hombre práctico, leal y patriota a los sanos intereses de nuestra república; por eso no son casuales todos estos logros, porque él es íntegro, honesto y un gran gerente, creando así una moderna infraestructura a la altura de los nuevos tiempos del IDAC.
Atentamente,
Robert Rosado
