CARACAS (AFP).- El ex presidente estadounidense Jimmy Carter dijo el martes que obtuvo del presidente Hugo Chávez y autoridades electorales la autorización para que sus observadores supervisen la verificación de las firmas recogidas para someter a referendum la continuidad del mandato del gobernante.
Carter, quien almorzó con el presidente Hugo Chávez y ofreció una rueda de prensa antes de retornar a Atlanta (EEUU), dijo que había sido negado el acceso de observadores de la OEA al «control superior» y al «control de calidad» del Consejo Nacional Electoral (CNE), que verifica las firmas.
«Yo solicité al CNE que ellos le otorgaran ese acceso y esta mañana (del martes) el CNE decidió que tanto la OEA como el Centro Carter tendrían acceso a esas dos etapas sumamente delicadas del proceso de confirmación de firmas», puntualizó.
Explicó que mientras el Centro Carter tiene sólo seis personas en Venezuela la OEA cuenta con 38 que son «suficientes para estar presentes en todas las salas».
«Nosotros no tenemos capacidad para eso; hemos solicitado tener acceso a resultados de los exámenes que se hacen en esos comités para verificar si son imparciales. Ahora el CNE nos ha otorgado el derecho a estar presente», acotó.
«Si decidimos en la marcha que haya otros elementos de este proceso donde debamos estar presentes lo solicitaremos y mi creencia es que no se nos negará», subrayó.
«Entiendo que las transcripciones se terminarán esta semana, así como la verificación de las actas, paro luego estudiar y comparar las firmas con las actas tomara más tiempo. Escuché que podría haber un máximo de 10 días de retraso, espero que todo esté listo para el 10 de marzo», en la recolección de firmas, reveló.
El CNE había estimado que el anuncio de si procede el referendo contra Chávez sería hecho el 13 de febrero. La oposición denunció en los últimos días los retrasos en las labores del conteo, señalando que favorecen a Chávez, al que acusan de querer evadir el referendo.
Este martes el mandatario aseveró que respetará la decisión del CNE cualquiera que sea, y que incluso pidió a sus seguidores que se preparen para la consulta. Además insistió en que los líderes opositores deben también comprometer su respeto a la «decisión del árbitro».
Al ser interrogado sobre las advertencias opositoras sobre los peligros de desconocer las firmas de sus adeptos y de Chávez de crear una nueva desestabilización en el país, Carter dijo que «en mi opinión no habrá violencia ni habrá subversión si la decisión del CNE es contraria a los deseos de la oposición».
«He alentado a los líderes de la oposición con quienes hablamos a que acepten la decisión del CNE cualquiera que fuera, si ésta es acorde con la Constitución, a las leyes del país y en total transparencia en cuanto a sus actividades», agregó.
«Algunos de los dirigentes de la oposición estuvieron de acuerdo con acatar la decisión; otros tuvieron objeciones. Así que mi decisión ha sido en esta rueda de prensa simplemente decírselo y dejar que ellos mismos sean los que hagan las declaraciones ya que no lo pueden hacer unánimemente», admitió.
Asimismo, Carter reiteró que «he solicitado a los medios de comunicación (principalmente opositores) que le den el beneficio de la duda al CNE, que no los condene si hay un pequeño retraso con tal que haya una explicación plena de ese retraso».
Chávez denunció un «megafraude» en la recolección de firmas en su contra, que la oposición asevera llegan a 3,2 millones y el mandatario, en contraparte, subraya que no llegan a los dos millones, insuficientes para impulsar el referendo.
Carter dijo que el mandatario le había mostrado dos o tres actas que podrían tener errores pero, asimismo, de parte de la oposición recibió datos «correctos».
«Ninguna de las dos presentaciones me sorprendió. Además esto le compete al CNE, donde existen dos miembros que son totalmente leales al gobierno y dos leales a la oposición. Yo espero que se demuestre la voluntad de los venezolanos», expresó.
Carter llegó el domingo a Caracas y desde entonces se reunió con medios de prensa, parlamentarios, magistrados del Tribunal Supremo de Justicia, el CNE y dos veces con Chávez.