Casa Abierta consideró que la condena a siete años de prisión a la cantante Marta Heredia, por traficar drogas a Estados Unidos, evidencia que la justicia dominicana sigue dominada por la estrategia del miedo.
Opinó que “esas formas ultrarepresivas solo conducen a llenar las cárceles de los más débiles. A causar mayores daños a las personas y la sociedad, que a contribuir en algo a detener el involucramiento de personas en la mala decisión de contrabandear sustancias ilegales”.
La organización que trabaja con adictos afirmó que es urgente cambiar ese modelo a uno centrado en las personas, la prevención, y el respeto de los derechos.
Dijo que el caso de Heredia “nos trae de nuevo a escena el drama de las mulas, o personas que asumen el contrabando de sustancias ilegales por un pago, que en general es insignificante, comparado con el costo de la mercancía que transportar”.