El director de Casa Abierta, Radhamés de la Rosa, manifestó su apoyo a la propuesta de despenalización del consumo de marihuana en el país, aunque aclaró que la República Dominicana no está en un momento propicio para legalizar la droga.
El también psicólogo considera que para legalizar el uso de la marihuana el país necesita primero despenalizarla y no perseguir a los individuos que consumen drogas, además de plantear una política más centrada en el bienestar de la persona, revisar el sistema educativo para mejorar la calidad de vida de la población y una mayor inversión en salud.
Manifestó que las autoridades dominicanas deben enfocarse en perseguir a quienes trafican las drogas y no a los que las consumen. “Eso es lo que hemos planteado con el tema de la despenalización, porque hace mucho que los expertos plantearon que fue un error la ilegalidad y que lo correcto es hacer una regulación estricta del consumo de la marihuana”, sostuvo.
De la Rosa señaló que la política represiva que se ha implementado en el país no ha logrado controlar el tráfico de estupefacientes, sino que lo ha convertido en un negocio lucrativo para muchos. “Esto solo ha demostrado que las drogas son ilegales pero no inaccesibles”.
Asimismo planteó que se deje de perseguir a las personas que consumen narcóticos, ya que solo aumenta el número de personas en las cárceles, cuando los consumidores deberían ser tratados como enfermos.
“En nuestro país solo se sabe reprimir a los consumidores y eso solo trae consecuencias peores para la sociedad y el individuo que ha sido privado de su libertad”, dijo.
Sostuvo que la política correcta para implementar en estos casos es crear más programas de orientación y ayuda, crear más opciones de atención a los consumidores problemáticos.
Desmintió que con la despenalización se incrementaría el consumo de marihuana en el país y reiteró que la penalización no funciona como método de prevención, ya que por estar penalizada la gente no deja de consumirla.
La OMS
Según la Organización Mundial de la Salud el consumo de alcohol y tabaco son de las principales causas de muertes en el mundo, ya que su uso desmedido acarrea una serie de daños a la salud y problemas sociales como la violencia y accidentes de tránsito. Mientras que el consumo de drogas es responsable de alrededor de medio millón de muertes cada año, y la situación continúa empeorando, especialmente en la población joven.