-FOTODELDÍA- AME1205. CIUDAD DE GUATEMALA (GUATEMALA), 06/07/2020.- Los hermanos Luis Enrique y Ricardo Alberto Martinelli Linares, hijos del expresidente panameño Ricardo Martinelli, permanecen detenidos en la Torre de Tribunales este lunes en Ciudad de Guatemala (Guatemala). De acuerdo a fuentes oficiales, ambos hermanos pretendían salir de Guatemala con destino a Panamá en un vuelo humanitario cuando las autoridades los detuvieron. El portavoz de la Policía Nacional Civil, Jorge Aguilar, explicó que los dos hermanos, de nacionalidad italiana y panameña, son acusados de "conspiración para cometer lavado de dinero implicando actividad específica según el código de los Estados Unidos". EFE/ Esteban Biba
Guatemala.– Las fuerzas de seguridad de Guatemala detuvieron este lunes a los hermanos Luis Enrique y Ricardo Alberto Martinelli, hijos del expresidente panameño Ricardo Martinelli (2009-2014), a petición de un tribunal de Nueva York (EEUU), por corrupción en la trama de la constructora brasileña Odebrecht.
Los hermanos fueron detenidos al filo de las 12 del mediodía de Guatemala (18.00 GMT), en el aeropuerto internacional La Aurora en Ciudad de Guatemala, y horas más tarde un tribunal de Nueva York confirmó la acusación por lavado de activos en su contra en el país norteamericano, con la intención de extraditarlos próximamente.
Los dos hijos de Martinelli habrían intermediado entre 2009 y 2014 en el pago de 28 millones de dólares por parte de Odebrecht a un exfuncionario panameño de alto rango, según informó el Departamento de Justicia estadounidense.
Luis Enrique y Ricardo Alberto pretendían salir este lunes de Guatemala con destino a Panamá vía aérea cuando las autoridades los interceptaron, según le dijo a la Agencia Efe el portavoz de la Policía Nacional Civil, Jorge Aguilar.
Las fuerzas de seguridad guatemaltecas trasladaron a ambos ciudadanos panameños a la Torre de Tribunales, en el centro de la Ciudad de Guatemala, para su primera declaración e informarles el motivo de la detención, para su posible extradición.
Ricardo Martinelli Linares, de 40 años, y Luis, de 38, se encontraban en paradero desconocido desde hace aproximadamente un año.
Según la acusación en el tribunal de Nueva York, entre 2009 y 2014, durante la Presidencia de su padre, los hermanos participaron de la trama de Odebrecht con acciones que incluyeron “la apertura y administración de cuentas bancarias secretas a nombre de compañías fantasma en jurisdicciones extranjeras».
“Estas cuentas bancarias secretas se utilizaron para recibir, transferir y entregar los pagos de sobornos”, detalló el Departamento de Justicia en su comunicado. Muchas de estas transacciones se realizaron en dólares a través de bancos estadounidenses, algunos de ellos en Nueva York.
El caso por lavado de dinero fue presentado ante el tribunal federal del Distrito Este de Nueva York (Brooklyn), el mismo en el que Odebrecht fue condenada en 2017 a pagar una multa de 2.600 millones de dólares tras declararse culpable de delitos de soborno.
LES SEGUÍAN LA PISTA
El portavoz de la Policía guatemalteca aseveró que la captura de los dos hijos de Martinelli se llevó a cabo tras identificarlos “a través de una unidad policial que se llama Centro Antipandillas Transnacionales, una unidad policial que tiene conexión centroamericana y con agencias internacionales».
De acuerdo con el Ministerio de Gobernación, los dos hermanos cuentan con “una orden de captura del juzgado de primera instancia penal pluripersonal de turno de Guatemala”, con una orden de extradición de Estados Unidos, firmada por la jueza Shirlly Johanna Maldonado Velásquez el 3 de julio.
Las autoridades de la misma cartera explicaron que “a estas personas se les venía realizando trabajo de vigilancia y seguimiento desde el 30 de junio del presente año, teniendo información clasificada que el día de hoy estarían saliendo del país”, supuestamente con rumbo a Panamá.
PAPEL DE DIPUTADOS DE PARLAMENTO CENTROAMERICANO
Los dos hermanos indicaron a la Policía Nacional Civil local “ser diputados suplentes al Parlamento Centroamericano” por Panamá y mostraron sus “cartillas diplomáticas número 0556 y 0557” del período del 1 de julio de 2019 al 30 de junio de 2024, ambos “fechados el 25 de julio de 2019”, según las autoridades.
Tanto Ricardo Alberto como Luis Enrique fueron designados como diputados suplentes al Parlamento Centroamericano en junio de 2019, por las agrupaciones políticas Cambio Democrático y Alianza, respectivamente.
El Parlamento Centroamericano, con sede en Guatemala, indicó mediante un portavoz que ambos son legisladores suplentes del ente regional, pero no pudo confirmar que tengan inmunidad en el cargo.
La familia Martinelli se pronunció en un comunicado divulgado en Panamá en el que indicaron que su prioridad es “asegurar” la “asesoría jurídica necesaria” para Ricardo Alberto y Luis Enrique en Guatemala.
“Confiamos que la situación jurídica de los hermanos Martinelli, en la república de Guatemala, sea resuelta lo antes posible, para que los mismos continúen el proceso de retorno a Panamá, con el fin de atender los procesos para los cuales han sido citados; tal como expresaron en un comunicado publicado en diferentes medios de la localidad,” apostillaron.
Una fuente del Ministerio de Gobernación (Interior) indicó que las autoridades desconocen cómo los hermanos entraron al territorio guatemalteco y tampoco han podido corroborar si las cartillas diplomáticas son auténticas.
Los dos hijos del expresidente Martinelli quedaron bajo la vigilancia de las autoridades a la espera de ser escuchados por un juez del Organismo Judicial, entidad que a la fecha ha reportado tres fallecidos por la COVID-19 y al menos 90 contagios entre sus funcionarios.
La rapidez del traslado a Estados Unidos ante los cargos en su contra dependerá de la decisión de los detenidos, quienes podrían oponerse a su extradición.
La semana pasada, además, la Fiscalía de Panamá impuso medidas cautelares de prohibición de salida del país y presentación periódica ante la autoridad al expresidente Ricardo Martinelli investigado por una trama de corrupción para la compra de un conglomerado de medios local.
Martinelli, de 68 años, enfrentó un juicio por malversación y espionaje político del que fue declarado en agosto pasado “no culpable”, un fallo que fue recurrido por la Fiscalía sin que hasta hora el tribunal correspondiente haya dado una respuesta.