SANTIAGO,  (AFP) – El líder cubano Fidel Castro habló ayer por teléfono a la cumbre paralela de Santiago, organizada por grupos de izquierda, a través del presidente venezolano, Hugo Chávez, quien iba repitiendo las palabras que su interlocutor le iba dictando.  Unas 5.000 personas en el Velódromo Nacional de Santiago asistieron a la última jornada de la llamada Cumbre por la Amistad de los Pueblos, donde participaron Chávez,  Evo Morales de Bolivia y Daniel Ortega de Nicaragua, y el vicepresidente cubano, Carlos Lage.  En un momento Chávez anunció, con un teléfono celular en mano, que estaba en contacto con Castro.  Tras saludarlo, Chávez trató de poner el altavoz para que se escuchara en vivo y en directo la voz de Castro desde La Habana, pero al no lograrlo -«tengo un problema técnico», le explicó- fue repitiendo al auditorio las palabras que éste le iba diciendo.