Bruselas.- El comisario europeo de Agricultura, Dacian Ciolos, aseguró hoy a los agricultores comunitarios que habrá una respuesta «proporcionada y rápida» si la situación generada por el veto ruso así lo requiere, y recordó que la Unión Europea (UE) dispone de herramientas de apoyo mientras el sector se reorienta.
«Entiendo la preocupación expresada por el sector agrícola comunitario. Quisiera subrayar que la Política Agrícola Común (PAC) dispone de instrumentos nuevos y modernizados para respaldarles, tan pronto como sea necesario, incluida la reserva para crisis, que ya está disponible», indicó Ciolos.No obstante, el comisario europeo indicó que en este contexto el sector debe reorientarse.
«Confío en que nuestro resistente sector agrícola se reoriente rápidamente hacia nuevos mercados y nuevas oportunidades», afirmó el comisario rumano, quien regresará este fin de semana a Bruselas para abordar el embargo ruso.Ciolos reconoció que «tiene que haber apoyo para ayudar a que esta transición pueda producirse sin sobresaltos», y que ello requiere a su vez «una respuesta europea común».El comisario de Agricultura explicó que ha hablado con los ministros europeos y en particular con el titular italiano, que encabeza este semestre los Consejos de la cartera, y dijo que «en el contexto actual lo más importante es reaccionar de manera proporcionada y rápida si la situación lo requiere».
También señaló que, como siempre cuando la situación de mercado lo exige, ha instruido a sus servicios para crear un grupo de trabajo que evalúe el impacto del embargo ruso por sectores y «analizar» cómo pueden «aportar de manera eficaz ayuda importante, si y cuando fuera necesario».
Por otro lado Ciolos convocará hoy para el próximo jueves en Bruselas una reunión comunitaria a nivel de expertos de los países miembros, a fin de evaluar el embargo ruso.
Moscú ha prohibido durante un año la importación de ternera, cerdo, verduras y hortalizas, frutas, carne de ave, pescado, quesos, leche y productos lácteos desde la UE, EEUU, Australia, Canadá y Noruega, por las sanciones que han impuesto a Rusia por su papel en la crisis ucraniana.