NUEVA YORK. AP.  La perspectiva de una censura pública en Washington al representante demócrata Charles Rangel por conducta antiética ha causado tanto tristeza como desdén en su barrio de Harlem, donde acaba de ser reelegido con 81% de los votos y sigue siendo un ícono para residentes que dicen que ellos son quienes decidirán su suerte política.  “Charles Rangel ha hecho mucho por esta comunidad en el Congreso, yo pienso que él debe salir del Congreso cuando él lo desee”, dijo Rachel Cummings, una consejera de 56 años que trabaja con drogadictos y alcohólicos. “El no va a salir cuando ellos dicen que es culpable de esto o lo otro. Déjenlo tranquilo”.  El jueves, el comité de ética de la cámara baja votó 9-1 en favor de recomendar una censura para el veterano representante.