PekÍn (EFE).- La superproducción Misión Imposible III (MI-3), filmada en China y protagonizada por Tom Cruise, no será aprobada por las autoridades chinas debido a sus contenidos inapropiados sobre la ciudad de Shanghai, informaron diversos diarios chinos.
La aprobación de la película ha sido indefinidamente pospuesta, señalaron al diario Xinmin Evening News funcionarios de la administración de Shanghai, que dijeron que a los censores no les gusta la imagen de la metrópolis china que ofrece la película.
Indefinidamente pospuesta fue la respuesta que dio la censura china hace seis meses para el estreno de la película Memorias de una Geisha, que finalmente no se estrenó en el país asiático.
Según el rotativo Beining Times, MI-3 incluye muchas imágenes negativas de Shanghai y el contenido es ridículo. Es muy posible que esta película no tenga suerte con la pantalla china.
La portavoz de la Administración de Radio, Cine y Televisión (SARFT, siglas en inglés) estuvo ilocalizable en su teléfono, según comprobó EFE.
China Film Group, única institución autorizada a importar cintas extranjeras para la gran pantalla china, señaló que la SARFT todavía no ha dado su aprobación para distribuir el filme.
Las autoridades chinas restringen a 20 el número de películas extranjeras que puede verse en la gran pantalla cada año con el objetivo de favorecer su industria nacional.
Según esta fuente, en junio ya se han aprobado suficientes películas extranjeras, por lo que el estreno (de MI-3) no se producirá el próximo mes.
El verano pasado, cuando la película, dirigida por Jeffrey J. Adams, se filmaba en China, el actor Tom Cruise concentró toda la atención de los medios de comunicación locales e incluso ofreció una rueda de prensa en Shanghai ante la expectación del rodaje.
Pero una buena parte de la audiencia que ya ha visto la película cree que es ridícula, señala el diario.
Los últimos cuarenta minutos de la cinta están rodados en Shanghai y en la vecina localidad de Xitang.
A las autoridades no les ha gustado la imagen que se ofrece de Shanghai, donde se puede ver por todos sitios tenderos de bambú con ropa secándose; y tampoco ha gustado que las malévolas mafias foráneas convivan en la metrópoli oriental, principal eje de las finanzas chinas.
China Film todavía no ha dado una contestación clara sobre si la película será aprobada: Hasta ahora no hemos recibido la autorización de la SARFT.