La Secretaria Ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), Alicia Bárcena, resaltó que urge que los países del Caribe tengan apoyo financiero concesional para dar respuesta a la crisis desatada por el COVID-19 y enfrentar las vulnerabilidades económicas y climáticas.
Indicó que estos enfrentan tres vulnerabilidades importantes: una caída de las visitas por turismo que se calcula estará entre 57% y 75% en 2020, lo que traería consigo una pérdida de ingresos que va desde los US$22.000 a US$28.000 millones; una alta exposición al cambio climático, con ocurrencias de desastres naturales, y este año se estiman 16 tormentas; y un alto nivel de endeudamiento público: 11 países tienen una relación deuda/PIB superior al umbral de sostenibilidad del 60%, y tres de ellos se acercan o superan el 100% de su PIB.
Explicó que la CEPAL propone cinco recomendaciones muy concretas: la iniciativa de alivio de la deuda mediante un canje de deuda por adaptación al cambio climático, que incluye la creación de un fondo de resiliencia; la paralización del servicio de la deuda y un cambio en los criterios de eligibilidad de las instituciones financieras internacionales para el otorgamiento de financiamiento concesional; bonos de contingencia, en especial con cláusulas sobre los huracanes; bonos verdes y azules; y el apoyo a la liquidez mediante la emisión de derechos especiales de giro.