Cerca del 40% de los padres de los estudiantes de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) nunca asistió a la escuela o no ha concluido el nivel básico, mientras  solo un 12%  obtuvo grado de licenciatura o ha hecho algunos estudios de cuarto nivel, según revela un estudio.

Esto implica que ese porcentaje pertenece a la primera generación universitaria de su familia, lo que eleva la posibilidad de que sus hijos también tengan una educación superior.

De los padres, 29.52% no completó la primaria, por lo que se puede estimar que apenas han sido alfabetizados. Solo   17% de los padres y madres logró obtener su título de bachiller.

Como consigna el informe “Perfil del estudiante uasdiano”, elaborado a finales de 2005 por Álvaro Belmar, Enilda García y María Díaz Solís, existe un equilibrio entre el nivel educativo de los  padres y de las madres.

En ese orden, las estadísticas indican que  11.97% de los padres de  alumnos de la UASD no ha completado el nivel medio, mientras  en las madres se trata de un 12.75%. Asimismo, un 0.64% de los padres tiene título de postgrado, que alcanzó un 0.83% de  madres.

A pesar de las similitudes, mientras las madres superan a los padres por fracciones porcentuales en  licenciaturas, postgrados y maestrías, los padres las dominan en los doctorados con 1.53% sobre  0.80%.

Implicaciones

Las investigaciones educativas  mundiales coinciden en señalar la importancia del acompañamiento de los padres para la educación de los hijos. Un estudio realizado en 2005 en provincias del suroeste, por Plan Internacional y la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), demostró una alta relación entre el nivel  de la madre y el rendimiento de sus hijos.

Al ser consultado al respecto, el rector del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (Intec), Miguel Escala, observó la importancia de la formación de los padres y  su apoyo a los hijos.

Sin embargo, el académico  destacó el hecho de que 40% de los alumnos de la UASD  venciera la barrera que tienen sus padres, “lo que habla  bien de sus deseos de superación”, dijo.

La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) también reconoce el valor de la asistencia de los padres en los primeros años de la educación de los hijos y en la realización de sus deberes, llegando incluso a instalar las llamadas escuelas para padres en decenas de  países de América Latina. 

Buscan semejantes

Ese afán de avance acompaña a los estudiantes incluso al buscar una pareja, ya que como demostró el estudio, se sienten atraídos por  personas con  nivel  superior o igual.

Así, un 38% de las parejas de los estudiantes de la universidad estatal es bachiller, posiblemente estudia alguna carrera, y asimismo el 19% posee un grado profesional o de cuarto nivel, como revela la investigación que se realizó mediante encuestas a los alumnos.

Las claves

1.  Rompiendo barreras

Como revela el informe, 40 de cada cien estudiantes de la UASD integra la primera generación educativa de su familia,  lo que abre sus posibilidades de progreso.

2.  Buscan iguales

Pero el esfuerzo de los jóvenes no se queda ahí,  además de iniciar su educación superior y de cuarto nivel, buscan como pareja a otros con iguales objetivos académicos.