El semanario satírico francés cuyo personal fue diezmado en un ataque de extremistas islámicos en 2015 reimprimirá las caricaturas del profeta Mahoma citadas por los asesinos, declarando que “la historia no se puede reescribir ni borrar”.
El anuncio apareció ayer en la víspera del primer juicio por los ataques de enero de 2015 contra el semanario Charlie Hebdo y, a un supermercado judío. Los asesinatos detonaron una ola de violencia en Europa reivindicada por el EI.