CARACAS (AFP).- El presidente venezolano Hugo Chávez acusó este viernes a su homólogo estadounidense George W. Bush de ser «el desestabilizador del mundo», al reiterar su denuncia de que en Washington se adelanta un plan para agredir a Venezuela, que incluye un atentado en su contra.

«Aquí hay un solo desestabilizador, que es George W. Bush, el gran desestabilizador mundial, la amenaza del mundo, pero ellos (el gobierno de Estados Unidos) dicen que soy yo la amenaza», señaló Chávez durante el acto de inauguración de un foro sobre la deuda social en Caracas.

En las últimas semanas Washington y Caracas han protagonizado un intercambio de duras recriminaciones.

El gobierno estadounidense acusó a Chávez de ser «desestabilizador de la región», mientras que el mandatario venezolano vincula a la Casa Blanca de gestar un plan contra su gobierno e incluso un magnicidio en su contra.

«Está en marcha un plan en Washington, están dándole forma a una nueva agresión contra Venezuela, agresión que no excluye la agresión física individual, en este caso contra mí», insistió este viernes.

«Sí hay una amenaza, pero no es Chávez», dijo el mandatario de 50 años, quien agregó: «Son los verdaderos líderes que no traicionan a su pueblo, y se convierten en colectivo en amenaza al modelo capitalista, explotador colonialista, imperialista».

«Somos los peligrosos locos del Sur, nos llaman igual, pero más locos están en el Norte algunos», dijo irónico.

Horas antes, el vicepresidente venezolano José Vicente Rangel denunció el complot contra Venezuela, pero dijo que el país sudamericano está «alerta y vigilante».

«No sabemos por dónde viene la cosa en este momento (pero) sabemos que están tramando algo contra el país», dijo Rangel.

«Venezuela es un país rodeado de adhesiones y solidaridad. En tanto, que Estados Unidos frente a esa política contra Venezuela está totalmente aislado», añadió.

El gobierno de Chávez mantiene unas difíciles relaciones con Estados Unidos, país que acusa de estar involucrado en el golpe de Estado que le separó del poder por 47 horas en abril del 2002 y de una constante injerencia en los asuntos internos de Venezuela.

Venezuela, único miembro latinoamericano de la OPEP, vende aproximadamente 1,5 millones de barriles diarios a Estados Unidos de su cuota de producción de 3,1 millones de barriles.