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CARACA (EFE).- El presidente venezolano, Hugo Chávez, anunció ayer que desconoce a la coalición opositora Coordinadora Democrática como «la oposición» a su gobierno, tras resistirse a aceptar el resultado del referendo que lo confirmó en su cargo.
«No reconozco ya a la llamada Coordinadora Democrática como la oposición política. No hay diálogo con quienes desconocen la Constitución y al pueblo», subrayó Chávez en su habitual programa dominical de radio y televisión «`Aló, presidente!»
Una semana después de los comicios «más transparentes de toda la historia venezolana», como subrayó que fue el referendo que el 15 de agosto pasado puso en juego su cargo, Chávez llamó «a los opositores democráticos y serios, a quienes se están desmarcado de la Coordinadora», a liderar la oposición y dialogar con el Ejecutivo.
«Esta llamada Coordinadora que apoya golpes de Estado, pero no reconoce el voto del pueblo, no representa para mi a la oposición (…); no tiene legitimidad y también hay que eliminarla del mapa democrático del continente», recalcó.
Chávez sostuvo que se requiere verdaderos líderes opositores democráticos «y yo los llamo a que den la cara», en reemplazo de quienes también evidencian, subrayó, «imbecilidad y ridiculez».
Repitió que para los «antichavistas» alejados de posiciones «antidemocráticas como las de la Coordinadora», entre los que nombró a gobernadores, dirigentes de partidos, dueños de medios de comunicación y miembros de la jerarquía eclesiástica, entre otros, «las puertas del palacio presidencial están abiertas».
Recordó que durante la votación del pasado día 15 y tras ella, durante toda la semana, los observadores internacionales de la Organización de Estados Americanos (OEA) y del estadounidense Centro Carter (CC) avalaron reiteradamente el resultado del referendo.
«Tres veces el Centro Carter, tres veces la OEA avalaron el proceso y el resultado, incluso el mismísimo gobierno de Washington, pero ellos de la Coordinadora siguen chillando como locos (…) que hubo un fraude que nadie más que ellos denuncian (…); no es justo que el mundo crea que la oposición son estas personas», remató.
Incluso opinó que si los líderes de la CD fueran consecuentes, deberían luchar contra su Gobierno clandestinamente en las selvas.
«`Qué se vayan al monte!», exclamó tras recalcar que éstos no sólo han rechazado el pronunciamiento popular en las urnas y han desconocido al Gobierno y las autoridades electorales, «y a todo el Estado», sino que también han arremetido contra los observadores internacionales que avalaron su triunfo.
Incluso «cacerolearon» al ex presidente Jimmy Carter en un restaurante de Caracas y han acusado de robo electoral a los militares que custodian las urnas con los votos ya auditados.
«No hay diálogo con estos que allá ellos el camino que quieran tomar», reiteró, sin aludir al Bloque Democrático, otra alianza opositora más radical, ni al ex presidente Carlos Andrés Pérez.
El Bloque indicó hoy mismo que «urge la desobediencia ciudadana para derrotar el fraude y evitar la guerra civil», mientras que Pérez expresó a una emisora colombiana que sólo por la fuerza será posible sacar del poder a Chávez.
«Viene una lucha violenta», añadió hoy Pérez desde Ginebra (Suiza) a Radio Caracol, tras opinar que «nos han cerrado todas las puertas de la paz y no nos queda sino usar esos otros medios» contra el «farsante» y «dictador», como tildó a Chávez.
También ratificó anteriores declaraciones suyas en las que apuntó que Chávez «debe morir como un perro» y agregó que él está «trabajando» para apartarlo del poder, y que «la vía violenta permitirá sacarlo».
«Es la única que tenemos. Yo soy una parte de ese batallón. Así como lo oye debe entenderlo: yo soy parte de ese batallón», había dicho hace tres semanas a un periódico caraqueño el ex presidente, en unas declaraciones que fueron rechazados públicamente por la Coordinadora Democrática. EFE
