CARACAS (AFP).- Como si fuese un sueño hecho en realidad para sus furibundos detractores, el presidente Hugo Chávez anunció la sorpresiva renuncia de su cargo, pero también recordó que este domingo se celebra el día de los Inocentes en Venezuela.

«Me voy, decidí adelantar el 2021», dijo el mandatario al referirse al año que asegura se va a separar de la política, ante una enmudecida audiencia que se agrupó para escuchar su maratónico programa «Aló presidente».

Luego de unos segundos, que se hicieron eternos para los seguidores de su «revolución bolivariana», Chávez soltó una carcajada y recordó que este domingo es 28 de noviembre, fecha en que la religión católica celebra el Día de los Santos Inocentes.

Chávez, que en 2002 superó un golpe de Estado y vivió el fin de año batallando contra un duro paro opositor que colapsó la industria petrolera, se encuentra al cierre de 2003 asedidado por la posibilidad de un referendo revocatorio de su mandato, que podría activarse el próximo año.

El mandatario trasmitió su programa en su pueblo natal de Sabaneta de Barinas, en el suroeste del país, donde fustigó a la oposición, entregó tierras a pequeños productores, declamó poemas y cantó canciones folclóricas.

En tono irónico, el mandatario afirmó que le dieron como regalo de navidad «una espada» que le servirá para batallar contra las luchas políticas que confrontará en 2004.

Dijo que esa misma espada le sirvió para destituir la directiva del Instituto de Seguridad Social de Venezuela, que según recordó está inmersa en actos de corrupción.

Los diarios venezolanos acostumbran cada 28 de diciembre publicar noticias exageradas para tomar el pelo a sus lectores.