POR ALEXIS MÉNDEZ
Llamó mi atención la portada de un disco de la legendaria Orquesta Aragón. Este se llevaba por título (en inglés y español) The history continues… La historia continúa. Más abajo se podía leer: Guest star Cheo Feliciano. Cheo y La Aragón, pretexto suficiente para descuadrar mi lánguido presupuesto, y deleitarme, y compartirlo con mis oyentes de MUSICA MAESTRO (El programa de radio).
Camino de ensueños fue el que recorrí cuando escuché al sonero puertorriqueño interpretar Son al Son, una composición que César Portillo de la luz le regaló al mundo en 1980: Mi tierra linda, porque te quiero/ yo a ti te canto mi son entero…
Debió haber sido una de las tantas cosas que Feliciano hizo en aquel viaje, para él maravilloso, en el que un 13 de Octubre de 1997, pisó suelo cubano. De ese viaje se desprende un documento maravilloso, otro disco donde quedaron grabadas las presentaciones de Cheo en el anfiteatro de Varadero y en el club Tropicana.
Volviendo a la grabación con Aragón, esta es una obra maestra. La orquesta no pierde su esencia, porque puedes sentir su aire Charanguero que marcó una época. Me llenó de regocijo escuchar a Cheo en sus inspiraciones, llamarle Su majestad Aragón. Así decidí llamarle a partir de ese momento, con el respeto que se merece esta agrupación, que ha sabido reinventarse en el tiempo, enarbolando el timbre de un coro que ha influenciado a más de dos generaciones de orquestas.
Recuerdo que de niño me atraían sus agudas entonaciones de Toma chocolate y paga lo que debe, en el conocido Bodeguero. Luego, mientras asumía mi destino salsero, fui descubriendo que temas como El paso de encarnación que grabó la Orquesta Harlow, Parampampan de La Dimensión Latina, y Calculadora de Oscar D´León, primero fueron grabados por ellos. También disfruté de las Estrellas de Fania que hicieron, a principio en los 80, un álbum titulado Viva La Charanga donde el estilo de Aragón fue imprescindible.
Por eso creo que Cheo no quedó corto al llamarlo Su Majestad. Porque es un imperio que se ha venido construyendo desde el 1939 cuando Oreste Aragón, su fundador, desde Cienfuegos (Cuba), descubrió que los violines, la flauta, el Cello, en síntesis, el sonido preferido por la blanca burguesía de principios del siglo XX, podía vestirse de pueblo llano.
En más de 60 años han creado otros éxitos como El Cerquillo, Cachita, Pare Cochero, Guajira con Tumbao, Tres lindas cubanas y Quiéreme siempre.
El éxito del Cha Cha Cha, en los 50, fue clave para que Aragón alcanzara fama internacional, de la mano de su entonces director Richard Egues. En los 70 conquistaron África. Se consagraron ante la gente de Malí, Guinea, Senegal, Zaire y Burkina Faso.
Hace un par de años los encontré acompañando a la diva africana Cesaria Evora, en el bolero Linda Mimosa. Hoy los disfrutó mezclando el cha cha cha con el hip hop. Esa versatilidad es la que los hace grande, merecedores de ese título…Su majestad Aragón.