Tras ocho años de estar ausente de los escenarios locales, el músico Chichí Peralta solo esperaba regresar con una producción a tono con la calidad que le gusta exhibir.
Y eso fue algo que logró la noche del sábado con su concierto De aquel lao del río, en el Palacio de los Deportes.
Aunque Chichí no logró reventar este escenario, si presentó una producción ágil y dinámica en la que tuvo como invitados a Juan Luis Guerra, José Antonio Molina dirigiendo la Filarmónica, la cantante japonesa Kumiko Yoshijara, El Prodigio, Willy, del grupo Redimi2, y a la actriz Verónica López.
Pero esto no fue todo. Para su regreso a los escenarios Chichí se asistió de la popular tecnología 3D, esta fue una propuesta muy innovadora con la que logró entusiasmar al público.
También tuvo un tremendo juego de luces y un sonido impecable. Cabe decir que ésta fue una de esas oportunidades en las que en este recinto deportivo se escuchó con claridad lo que el cantante decía.
Asimismo incluyeron los vídeos clips de algunos temas de sus discos.
Tecnología
A las 9:20 de la noche un vídeo en el que se presentaba al símbolo característico de Chichí, es decir, una figura con influencias taínas que toca una tumbadora, acompañado de una cuenta regresiva de cinco minutos y una voz estentórea que anunciaba el pasar del tiempo, caldearon los ánimos de la gente que constantemente aplaudía para que iniciaran la presentación.
A seguidas se pudo ver un vídeo en 3D. La historia se desarrolla en un ambiente selvático con serpiente y león incluidos. Se puede ver a Chichí correr con el león y, cuando ambos están cerca del precipicio, la mano de Jesús le ayuda a llegar de aquel lado del río.
A partir de ahí, el músico y también cantante tuvo el público a sus pies. Hubo conexión entre ambos.
Artistas invitados
En las dos horas que el concierto tuvo de duración, Chichí contó con el respaldo de grandes artistas y músicos amigos.
El primero en subir a escena fue el acordeonista santiaguense El Prodigio, quien acompañó a Chichi y a su banda en el tema Apacigüao, el cual se desprende del álbum que lleva el mismo nombre del concierto. El pimentoso merengue fue danzado por cuatro parejas de bailarines. La coreografía fue de Luis Tejeda.
El Prodigio volvió a acompañarlo en la canción La ciguapa. A modo de introducción del tema se exhibió un vídeo en el que en una noche de luna llena se ve a este personaje de la cultura dominicana.
Con el ánimo bien encendido y la adrenalina en un alto nivel, el público recibió con ovaciones a José Antonio Molina, director de la Orquesta Sinfónica Nacional.
El maestro y la Filarmónica acompañaron a Chichí en Sol de verano, De vuelta al barrio, y Amor narcótico. Estos fueron de los temas que el público más celebró.
Lamentablemente el sonido de la banda de Chichí opacó al de la orquesta dirigida por Molina.
La adrenalina subió a su más alto nivel cuando Chichí hizo a dúo con su hermano y amigo Juan Luis Guerra, el tema Check it out. El público recibió a este gigante de la música dominicana de pie.
Los duetos con Willy en De que viene, viene y con la japonesa Kumiko Yoshijara en Amor samurai ganaron aplausos.
Poco respaldo
El Palacio de los Deportes, escenario que acoge unas 10 mil personas, no estuvo lleno a capacidad. No obstante, los asistentes disfrutaron el concierto de principio a fin.
La despedida
Chichí finalizó el concierto en medio de la algarabía de la gente con la repetición de los temas La negra bella y La ciguapa.
Las claves
1. Seguidora
Como toda una fan enamorada estaba Erbis, la esposa de Chichí. A ella le dedicó Te amaré, canción que escribió para su compañera.
2. Público
Chichí Peralta interactúo mucho con su público al que constantemente se dirigía. Entre ellos estaba su madre, comunicadores y otras figuras del espectáculo.