AME145. SANTIAGO (CHILE), 04/07/2021.- Elisa Loncón, constituyente mapuche, es electa presidenta de la Convención Constitucional hoy en la sesión inaugural de la Convención Constitucional, en el antiguo Congreso Nacional, en Santiago (Chile). EFE/Elvis González
Las protestas ciudadanas obligaron a suspender por unas horas el acto inaugural
Chile logró encauzar ayer el inicio de la redacción de su nueva Constitución tras una jornada convulsa, marcada por las protestas ciudadanas y de un grupo de constituyentes, que obligaron a suspender temporalmente el acto inaugural y sembraron dudas sobre el arranque de esta tarea.
El país consiguió abrir un nuevo capítulo en su historia después de que los 155 miembros que conforman la convención constitucional, la primera del paritaria del mundo, tomaran posesión de su cargo para redactar la nueva Carta Magna, la primera que emana de un proceso democrático y que sustituirá a la actual, heredada de la dictadura de Augusto Pinochet.
“Quiero agradecer a todo el pueblo chileno por votar a una persona mapuche y mujer para cambiar Chile. Esta convención transformará el país y lo volverá plurinacional e intercultural”, celebró Elisa Loncon, académica, lingüista e indígena, elegida como la presidenta del órgano constituyente.
Con una derecha debilitada, que solo ostenta 38 de los 155 escaños del órgano, y el auge de los candidatos independientes -en su mayoría progresistas-, la convención tendrá la misión de encarrilar a un país fuertemente afectado por una crisis social e institucional que amenaza su estabilidad.
Convulso arranque Si algo marcó el transcurso de esta jornada fue la irrupción de un grupo de constituyentes que se negó a tomar asiento al comienzo del acto y, a gritos, exigió el cese de lo que denominaron “represión policial” contra grupo de manifestantes que se encontraba a las afueras del recinto, obligando suspender casi 1 hora encuentro.
Masivas marchas pacíficas se llevaron a cabo horas antes en distintos puntos de la capital, convocadas en su mayoría por constituyentes o grupos de simpatizantes, pero se produjeron también disturbios aislados en puntos cercanos al antiguo Congreso Nacional.