Hoy 
Chile. El miércoles ocho de abril deberá comparecer ante la fiscalía chilena el hijo de la presidenta Michelle Bachelet, Sebastián Dávalos, y su esposa, Natalia Compagnon.
La justicia chilena indaga la posible compra de terrenos irregular por parte de la empresa Caval, perteneciente a la mujer de Dávalos.
Y esta semana varios implicados deberán comparecer para responder por su implicación en las compras.
El caso Caval es uno de los varios casos de corrupción que afectan a Chile en los últimos tiempos.
Tal es así, que la presidenta Bachelet presentó el mes pasado un consejo que se encargará de formular iniciativas para contenerlos.
La iniciativa llegó después del escándalo desatado por el caso Penta, que involucra a empresarios y políticos, y el caso Caval, más conocido localmente como «nueragate».
Y el último escándalo estalló hace unos días, cuando el Servicio de Impuestos Internos (SII), encargado de aplicar la normativa tributaria, denunció ante la Fiscalía a los representantes de la firma minera Soquimich, cuyo principal controlador es Julio Ponce Lerou, exyerno del dictador Augusto Pinochet.
La investigación sospecha de un caso de financiación irregular de campañas y corrupción política.
