China Continental: Solución o problema?

China Continental: Solución o problema?

MARÍA FILOMENA BARLETTA
Desde el punto de vista político, tiene poco sentido una relación de Estados Unidos de Norteamérica con dos países comunistas, como lo son China Continental y Vietnam. Las convicciones democráticas norteamericanas, que por mucho tiempo suscitaron la famosa «guerra fría» con la Unión Soviética y otros países de izquierda, aunque concluyó con la caída del muro de Berlín, fue antecedida también por un fracaso militar en Vietnam para el gran país estadounidense.

El sistema totalitario que impera en China es contrario a los Derechos Humanos que proclama Estados Unidos. Sin embargo, la economía estadounidense, ávida de expansión y sobre todo de supervivencia, se ha abierto a estos países con políticas y filosofías contrarios, con excepción de Cuba.

China, por su lado, expande sus ventas hacia un país rico que le permite, no solo la supervivencia para sus miles de millones de habitantes, sino un crecimiento inusitado que sobrepasa actualmente al coloso americano.

De hecho, el mercado de valores de la Bolsa Americana se mantiene, no solo gracias a las inversiones en empresas americanas, sino a fondos invertidos también, en países como China.

De momento todo parecía ir muy bien, hasta que la falta de control de calidad en algunos renglones chinos, ha producido escándalos que han culminado con la misma ejecución de uno de sus funcionarios gubernamental.

Se empezó con productos farmacéuticos, luego productos de higiene y ya se está hablando de neumáticos y de juguetes.

Qué está pasando? Se derrumba el nuevo coloso asiático por si mismo o lo están bombardeando adrede?

Cuidado con China! El poder económico con el tiempo puede convertirse en un gran poder político y por ende hasta imperialista.

Si de algo carece EUA, comparado con China Continental, aunque parezca inverosímil, es de disciplina.

Sea por el régimen totalitario y el miedo a la cárcel o el paredón, o bien sea por el seguimiento de la filosofía de Confucio, los orientales, en sentido general, superan a los occidentales. Y en ese tenor, esta disciplina produce grandes volúmenes de producción que unido a bajos salarios, reduce los costos, poniendo en grandes aprietos las empresas tradicionales estadounidenses.

EUA, ahora sumergida en una nueva guerra incontrolable en Medio Oriente, necesita mantener su economía activa para cubrir su déficit interno producto de las actuales circunstancias. Es posible que, con el tiempo, hasta se abra a Cuba. Mientras tanto, aunque tenga un gran mercado para sus exportaciones, también tiene un competidor poderoso y peligroso. Ese mismo competidor que con sus compras enormes de materias primas a nivel mundial está provocando una demanda extraordinaria y afectando los precios provocando una elevada inflación internacional.

¿Cambiará, en el corto plazo, la relación económica China-EUA?

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