BUENOS AIRES (AFP).- El presidente de China, Hu Jintao, firma este martes con el presidente de Argentina, Néstor Kirchner, acuerdos de cooperación que permitirán al gigante asiático ampliar sus negocios con la región y a la empobrecida nación sudamericana captar inversiones en sectores estratégicos.

   Kirchner, junto con su esposa, la senadora peronista Cristina Fernández, le dio la tarde del martes la bienvenida a Hu y a su mujer, Liu Yongqing, en las puertas de la Casa Rosada, la sede del gobierno, donde se le rindieron al visitante honores del más alto nivel.

   El auto que condujo al mandatario chino llegó escoltado por una guardia de Granaderos a Caballo y a sus pies fue tendida una alfombra roja, sobre la cual se ubicaron las dos parejas para escuchar los acordes de los himnos nacionales, antes de ingresar al edificio, donde Kirchner y Hu se reunían a solas.

   La visita de Estado estuvo cargada de expectativas por los términos de la nueva era de cooperación que iniciarán los dos países.

   Con un vasto operativo de seguridad desplegado en la aeroestación, el mandatario chino había llegado al aeropuerto internacional de Ezeiza, al sur de Buenos Aires, al frente de una amplia comitiva proveniente de Brasilia.

   Niños de la colectividad china en Argentina que agitaban banderas rojas de su país le dieron la bienvenida al mandatario, a quien las autoridades recibieron con los máximos honores civiles y militares.

   Hu caminó junto a su esposa a lo largo de la alfombra roja estrechando las manos de funcionarios del gobierno y de representantes de la comunidad china, mientras una fanfarria ejecutaba los sones de una marcha militar de recepción.

   El mandatario arribó en un Jumbo 747 de Air China casi media hora después de lo previsto y fue recibido por el jefe de gabinete de la Cancillería, Eduardo Valdez, junto al embajador argentino en China, Juan Carlos Morelli, y otros miembros del cuerpo diplomático.

   Valdez admitió que «los términos de los acuerdos van a ser terminados este martes en una reunión entre el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, y las máximas autoridades chinas».

   Los convenios darán precisiones sobre la magnitud de las inversiones chinas en el país, luego de que desde los despachos oficiales se filtraron a la prensa versiones que elevaban la cifra a unos 20.000 millones de dólares, desmentidas luego por ambos gobiernos.

   Mediante un comunicado, el mandatario chino expresó su satisfacción por la invitación que le formuló Kirchner.

   «Durante los 32 años transcurridos desde el establecimiento de relaciones diplomáticas, China y Argentina han venido profundizando la confianza mutua política entre sí y ha sido fructífera su cooperación de beneficio mutuo en los campos económico, comercial, científico, tecnológico y cultural», dice el texto.

   Once motocicletas abrieron paso a más de medio centenar de autos oficiales que acompañaron a Hu y su delegación hasta un hotel de una cadena estadounidense, ubicado en el barrio Puerto Madero donde se hospedará durante su estadía en Buenos Aires.

   Tres camiones fueron necesarios para trasladar el equipaje de la delegación china para cuyo alojamiento se reservaron cerca de 160 habitaciones.

   La noche del martes Hu y su esposa eran agasajados en una cena que brindará el gobierno en el Palacio San Martín, aristocrática sede protocolar de la Cancillería.

   El mandatario chino cumplirá el miércoles una ajustada agenda que incluye una reunión con el presidente de la Corte Suprema, otra con el alcalde de la ciudad de Buenos Aires y una visita al Congreso de la Nación.

   Hu tiene previsto partir la tarde del miércoles rumbo a la turística ciudad de San Carlos de Bariloche, en la Patagonia argentina, a unos 1.800 Km al sudoeste de Buenos Aires.