Entre la exposición al contagio por el virus covid-19 y el sufrimiento de no poder llevar el pan de cada día a sus familias, se encuentran los vendedores ambulantes, quienes rogaron al Gobierno tomar una decisión urgente con ellos.

Estos ciudadanos, que con lo que producen a diario en las calles sostienen sus hogares, dijeron no tener quien los defienda, pues entienden que el Gobierno no ha pensado en lo terrible que es regresar con manos vacías al hogar o en su defecto estar imposibilitados por las restricciones ciudadanas impuestas.

Vendiendo artículos para teléfonos móviles bajo un candente sol, en el semáforo de la avenida 27 de febrero con Enrique Jiménez Moya, Nolio Valdez se desahogó contando las penas, que junto a su familia tiene que pasar.

“Esto del coronavirus nos tiene demasiado mal y ahora con la Policía llevándose a uno. ¿Qué le llevo a mis tres hijos? A nosotros nos está yendo mal y nos quieren sacar de la calle”, dijo Valdez, quien nació en La Vereda de San Juan.
Clamó al primer mandatario para que auxilie a los hombres y mujeres que por obligación salen a las calles a vender lo que sea para poder comer.

Reconocen que la salud está primero, pero su esperanza es ver la ayuda fluir a los chiriperos, como José Luis Rondón, quien desde un puesto de frituras pelea contra la pobreza.

“Económicamente nos ha impactado esto del virus, pero tenemos que acatar la ley porque la salud está primero”, expresa Rondón, quien ha visto disminuir sus ventas por el coronavirus un que agradece a Dios por seguir vivo y con salud.

Recuerda que una vez tuvo la Tarjeta Solidaridad, pero le fue quitada y no ha valido el esfuerzo para volver a tener dicha ayuda.

En la calle Manganagua de Los Restauradores, el clamor es de César Morel Caraballo, quien se dedica a la instalación y reparación de todo tipo enseres del hogar, trabajos de construcción y soldadura, se hizo sentir en tono de preocupación.

“Todo está paralizado. Tengo más de 15 días que no trabajo”, expresó este hombre de 39 años, que con su esposa tiene 3 hijos, pero cuya madre y hermanos también dependen él.

“Deseo que el presidente encuentre la forma de viabilizar que realmente podamos ser beneficiados por las medidas tomadas por el Gobierno, porque estamos muy afectados”, dijo, confiado en que su clamor será escuchado.

Igual caso se presentó en la parada de motoconchistas del Mercado de Productores de Pintura, quienes llevan semanas sin poder “buscarse el moro” para sus familiares y según explicaron nadie del gobierno, se les ha acercado con intención, de por lo menos, orientarles sobre cómo enfrentar su crisis económica junto con la sanitaria.

A los chiriperos se les está dificultando llevar la comida a casa, ya que no hay a quien venderle su mercancía.