Chispitas-Chispitas

Chispitas-Chispitas

No se deje hipnotizar y menos robar. A quien se le acerque con truquitos pélele los ojos y pestañee como si estuviera dando cambio de luz. Otra más y van muchas. Ahora roban hipnotizando.

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Las calles de la capital están llenas de haitianitos pidiendo. También Santiago. ¿Quién los patrocina?

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La piratería es una industria peligrosa. En el Malecón de Puerto Plata venden discos que en las cajas de protección ponen el Escudo dominicano como centro de atracción. Quienes ven el Escudo creen que se trata de un disco con el Himno Nacional. Tremenda sorpresa: merengue, salsa y bachata.

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También en Puerto Plata vimos a una señora haitiana pidiendo. Con niño en brazos y embarazo de siete meses, estaba en el Malecón de un lado a otro. Insistimos, alguien debe ser dueño del negocio.

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Silvester Stallone tuvo que regresar con la violencia de Rambo para poder ser taquillero. El hombre de nuevo filmará.

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En el cine una cosa es lo que dice el actor y otra lo que hace saber el público. A Stallone lo etiquetaron como Rocky y Rambo. Una buena idea, aprovechando la técnica moderna, sería enfrentar a los dos personajes en una misma película.

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No hay mal que dure 100 años ni cuerpo que lo resista. Hay unos cuantos viejitos que van a las plazas comerciales a enamorar muchachitas. Dizque toman tantas pastillas, de esas que hacen milagros, que hasta en el pelo se les nota. Vamos a rebajarle algo.

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Una verdad, así como van los viejitos, así van las muchachonas mirando a donde no van a comprar, sino usando las paradas de tiendas en tiendas, mientras de lado escuchan los piropos. «Hola linda, te gusta ese reloj», fue lo que escuchamos el otro día. De la voz femenina salió: «¿Por qué, me lo vas a comprar?»

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La bachata y el merengue típico están muy pegados en el Cibao. La radio los pone bastante.

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Ayer hicimos referencia a «lindos» nombres de algunas damas. Hoy enfocamos los de hombres. Por ejemplo, Altagracio, Bernardo, Crucito y Timoteo.

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Lo decimos, hay nombres que impiden aumentos de libras. La buena suerte sólo los acompaña en algunos casos.

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