BLACKSBURG, Virginia, EEUU (AP).- Entre el primero y el segundo tiroteo que perpetró, el atacante de la Universidad Virginia Tech envió por correo un paquete al noticiero de la televisora NBC, el cual contenía imágenes de él empuñando armas y un video en el que pronunciaba una arenga furiosa y llena de obscenidades sobre los ricos «consentidos» y sus «necesidades hedonistas».
«Ustedes tenían cien millones de millones de oportunidades y medios para evitar lo de hoy», dice Cho Seung-Hui, de 23 años, con una voz dura y monótona, en un tramo del video emitido por el noticiero nocturno de la NBC. «Pero ustedes decidieron derramar mi sangre. Me arrinconaron y me dieron una sola opción. La decisión fue de ustedes. Ahora tienen las manos manchadas de sangre y nunca podrán lavárselas».
NBC dijo que el paquete, que llegó con el correo de la mañana del miércoles, contenía una diatriba de 1.800 palabras y 29 fotos, en 11 de las cuales Cho apuntaba con una pistola a la cámara. Buena parte de su arenga es incoherente, llena de obscenidades, y clama contre el hedonismo y el cristianismo, dijo NBC. Insiste varias veces en que lo atacaban.
«Ustedes han devastado mi corazón, violado mi alma y quemado mi conciencia», dice. «Creían que extinguían la vida de un chico patético. Gracias a ustedes, muero como Jesucristo, para inspirar a generaciones de personas débiles e indefensas».
El paquete, que llegó a la sede de la NBC en Nueva York dos días después que Cho mató a 32 personas y se suicidó en la mayor matanza con armas cortas perpetrada por una sola persona en la historia moderna de Estados Unidos, llevaba un matasellos que indicaba que había sido enviado desde una oficina de correos en Virginia a las 9.01 del lunes, una hora y 45 minutos después que Cho abrió fuego por primera vez. Eso explicaría uno de los mayores misterios de la masacre: dónde estaba el pistolero y qué hizo durante el lapso de dos horas entre los primeros disparos, en un edificio de alojamiento, y el segundo, en un edificio de aulas.
«Sus Mercedes no les bastaban, consentidos», dice, aparentemente leyendo un texto. «Sus collares de oro no eran suficientes, presumidos. Sus fondos en el banco no les bastaban. Su vodka y su coñac no les bastaban. Nada era suficiente para satisfacer sus necesidades hedonistas. Tenían de todo».
En algunas fotos aparece sonriendo. En otras sostiene una pistola en cada mano, y en una blande un martillo.
Un empleado de correos llamó la atención sobre el paquete al advertir que el remitente era de Blacksburg y tenía un nombre similar al que, según trascendidos, apareció escrito en tinta roja en el brazo de Cho: «Ismail Ax», dijo NBC.
NBC dijo que el sello con la hora en que se recibió el paquete indicaba que el material fue colocado en el correo en el lapso de dos horas entre el primer tiroteo en un dormitorio en un edificio y el segundo ataque en un edificio con salones de clases.
Los detalles que surgieron el miércoles _que había sido acusado de acosar a dos alumnas y que fue trasladado a una instalación de salud mental debido a que se temía que se suicidara_ incrementaron la creciente lista de señales de advertencia que aparecieron con bastante anticipación al día en que el joven desatara su tiroteo descontrolado, en el que mató a 32 personas antes de suicidarse.
Entre otras cosas, los escritos desequilibrados y llenos de violencia de Cho, y su actitud hosca y con la mirada huidiza habían preocupado tanto a los profesores y estudiantes que fue retirado de una clase de inglés y en repetidas ocasiones se le insistió que debía recibir ayuda psicológica.
El joven había sido llevado a una clínica psiquiátrica en el 2005, pero nunca fue acusado formalmente del acecho a las chicas, informó el miércoles la policía.