Por Daniel Dombey en Londres y Andrew
Bounds en Estrasburgo
La Unión Europea y Estados Unidos están trabados en una disputa sobre el cambio climático, pocos días antes de una cumbre de muestra que tiene la intención de presentar la colaboración entre ambos países.

Los diplomáticos dicen que los funcionarios de EEUU y Europa todavía tienen que ponerse de acuerdo en el texto de una declaración sobre la seguridad energética y el cambio climático, con la intención de acompañarlos a la cumbre de Washington el lunes próximo.

La vieja resistencia de EEUU a poner límites a las emisiones de dióxido de carbono también continúan siendo una frustración para la UE, que está deseos de avanzar en un esquema que sustituya el protocolo de Kioto, a partir de 2012, y que ya ha prometido reducir sus propias emisiones 20% en 2020

La cumbre debe contra con la presencia de George W. Bush, Angela Merkel, la canciller de Alemania, y José Manuel Barroso, presidente de la Comisión Europea.

Insistimos en la conexión entre la política energética y el cambio climático, dijo Catherine Colonna, ministro de Francia en Europa, después de una reunión esta semana. Ella dijo que cree que es esencial enfrentar la cuestión de política energética después de 2012: El planeta y el futuro de la humanidad están amenazados por el calentamiento global.

Sin embargo, en una entrevista con el Financial Times, C. Borden Gray, embajador de EEUU en la UE, dijo que los europeos están equivocados si esperan un cambio en la política sobe el cambio climático de EEUU, aún después de la administración Bush. No creo que importe qué partido controla la Casa Blanca o el Congreso, dijo. Los demócratas han indicado muy, muy intensamente en la Cámara de Representantes que el mundo tendrá que involucrar a China y la India antes de que surja alguna legislación sobre el cambio climático.

EEUU ha estado argumentando por largo tiempo que sería fútil que Washington firmara límites obligatorios sobre las emisiones de carbón, a menos que economías de rápido crecimiento, como China y la India también lo hicieran.

Las palabras de Gray resultarán una decepción para los gobiernos europeos, como Alemania y el Reino Unido, que esperan que EEUU cambie su posición sobre el cambio climático, como ya ocurrió en un número creciente de estados y municipales estadounidenses, en particular California, que ya introdujo límites obligatorios para las emisiones de dióxido de carbono.

Gray dijo que EEUU, que tuvo medidas más duras sobre las emisiones de los vehículos que Europa, estuvo en la primera línea de aportar soluciones técnicas a los desafíos del cambio climático. Alegó que la UE debería dedicar mayor atención a la tecnología limpia de carbono.

Estamos haciendo una investigación con unos US$5 millardos, US$6 millardos anuales, para las tecnologías que serán absolutamente esenciales para ganar esta guerra, y esa es la cuestión de la captura del carbono, dijo de EEUU. Somos los que estamos gastando dinero.

Añadió que tanto a EEUU como a la UE les preocupa que Rusia, no sea capaz de cumplir con sus compromisos [de suministrarle gas a Europa] por falta de inversión en su infraestructura. Dijo que la inversión en el carbono podría proteger a la UE de depender demasiado de Moscú. El mejor competidor del gas ruso podría ser muy bien el carbón limpio, expresó.

En la declaración de la cumbre, la administración Bush desea concentrarse en reducir el uso de la dependencia energética. La motivación no importa, mientras el objetivo sea el mismo, dijo Gray.