Chris Corcino era un joven como cualquier otro dominicano inmigrante en los Estados Unidos. Fue lavaplatos, chef, parqueador de carros, pero tenía un sueño: ser creador de software, razón por la que todos los recursos que obtenía en esos oficios los dedicó a costear sus estudios en el área.
Su interés por la tecnología lo ha colocado en un sitial preponderante del mercado. A través de su empresa Intellisys, que inició en una habitación de un apartamento con dos personas y hoy cuenta con más de 40 empleados y varios colaboradores internacionales, ha permitido que jóvenes de diferentes puntos del país se interesen por esta vertiente de la informática.
Regreso a RD. Abrazó el sueño de regresar a la patria que lo vio nacer desde 2004, sin embargo, la condición laboral de los programadores en República Dominicana, los cuales no devengaban un salario digno, era algo que lo frenaba a dar el paso. Por ello pensó en empezar su propia empresa de programación y dar oportunidad a otros.
En 2006, el jefe de la empresa donde trabajaba en Estados Unidos le dio un pequeño proyecto, que Chris envió a un programador freelance en el país. Cuando ese proyecto fue bien, su jefe le asignó más y más grandes proyectos, que a su vez entregaría a más desarrolladores independientes.
A pesar de que nunca se perfiló como un hombre de negocios, en 2008 decidió reunir a los tres desarrolladores con los que había trabajado hasta ese momento, alquilar un apartamento en Santiago y a partir de ahí nació su propio proyecto de creación de software.

Instituto. Posteriormente, Corcino y su esposa, Dalisa Heredia, fundaron en Santiago el “Cincinnatus Institute of Craftsmanship”, una escuela que forma en programación y software capital humano para empresas internacionales.
Entrevistado por la Esquina Joven de Hoy, Chris explicó que en el instituto, además de la parte académica, potencia el trabajo en equipo y el liderazgo.
Desde Santiago, Intellisys ofrece servicios de software y programación a reconocidas firmas de Estados Unidos y Canadá. De hecho, varios de los jóvenes a los que él ha dado la oportunidad, brindan sus servicios a empresas de renombre como Google.
Chris cree que quien no hable “el lenguaje de las máquinas” corre el riesgo de quedarse fuera de la marcha de la economía. A su juicio hay que trabajar la inclusión tecnológica como mecanismo de equidad social.
Equipo. Forman parte del equipo Lirme Colón, Aneudy Cáceres, Jorge Ferreira y Amelvis Franco, quienes apoyan en la parte gerencial de Intellisys, una empresa que desde ya muestra sus avances y el impacto que generará en un futuro próximo en los jóvenes que en cada punto del país abrazan la informática como una pasión y una carrera.
El joven empresario también trabaja con los Centros Tecnológicos Comunitarios (CTC), que auspicia la Vicepresidencia de la República, expresó durante la entrevista.
Concurso. Con el propósito de estimular la inserción de jóvenes en la nueva economía digital, explicó que decidieron organizar el concurso “Reto Nacional a la Creación de Software Intellisys Challenge”, dotado de un millón de pesos.

Sostuvo que esta iniciativa puede ayudar a cambiar la llamada generación “Ni Ni”, que ni estudia ni trabaja.

El reto que supone el premio en su primera entrega, dirigido a jóvenes de todo el país entre 18 y 25 años, es crear un “Sistema de Gestión Empresarial” cubriendo tres etapas; desarrollo, aplicación y gestión, que serán evaluadas por un jurado altamente calificado.

Procedimiento. Los interesados en participar pueden preinscribirse en el enlace Cincinnatus.edu.do/intellisyschallenge desde ahora hasta que las inscripciones se abran oficialmente el primero de abril.
“Haciendo el proceso de preinscripción los estudiantes tendrán acceso exclusivo a un contenido de entrenamiento para adquirir conocimientos que facilitarán el desarrollo del reto”, dice un comunicado de los patrocinadores.

El concurso tendrá un ganador único, bajo participación individual o grupal, mientras que el resto de los participantes contarán con la oportunidad de ser evaluados y considerados para trabajar en Intellisys.

Corcino destacó que la premiación busca “atraer a más personas tanto para estudiar en el Instituto Cincinnatus, como para laborar en la empresa Intellisys D.Corp. en calidad de desarrolladores, gracias a la creciente demanda de los clientes”.
“En el país hay muchos jóvenes valores que se pierden porque no encuentran una oportunidad. Soy de Manabao, Jarabacoa, es un campo, y así como yo hay otros chicos interesados en aprender y no encuentran la forma”, precisó.
Evaluación. El jurado del concurso estará compuesto por especialistas destacados en programación y tecnología, funcionarios en el área de gestión empresarial objeto de automatización y representantes de los Centros Tecnológicos.