La alegría se reflejaba en los rostros del embajador y los miembros de la comunidad alemana en el país. Ellos lo viven como si estuviese sucediendo nueva vez, y es que el 3 de octubre de 1990, 45 años después del fin de la Segunda Guerra Mundial por la que quedó dividido en dos por un muro el país, Alemania se reunificó, un hecho único en la historia, que le proporciona júbilo y emoción a esa nación.
Este vigésimo aniversario de la Reunifiación, acontecimiento que ha sido nombrado como Día de la Unidad Alemana, el embajador alemán en el país, Christian Germann, lo festejó con una recepción en el salón Alcázar del hotel Santo Domingo.
El diplomático recibió a sus invitados en un ambiente adornado por banderines de su patria y en elegantes jarrones reposaban rosas rojas y amarillas que identifican dos de los colores de su lienzo patrio. Ya con la mayoría de sus invitados presentes, Christian Germann pronunció un discurso en el que expresó que este aniversario es una ocasión propicia para volver la vista atrás y mostrar gratitud por el hecho de que el camino hacia la Unidad Alemana fuera tan inesperado, rectilíneo y rápido. Eso se lo debemos a nuestros socios occidentales y orientales.
Buenas relaciones
Christian Germann
Consideró que las relaciones económicas, culturales y políticas entre Alemania y República Dominicana se han desarrollado positivamente en los últimos 20 años y actualmente son excelentes. No exagero cuando les digo que el año 2010 es un año histórico para las relaciones bilaterales. A inicios de julio se realizó la primera visita de un presidente dominicano a Alemania. Para nosotros este es un país clave y una plataforma para toda la región del Caribe, por su cercanía cultural y política a Europa, el Caribe y América Latina gozan de la atención especial del Gobierno Federal alemán. En agosto, el Gobierno Federal ha publicado un nuevo concepto político para las relaciones con esta región, demostrando el interés por las buenas relaciones.