A finales del pasado milenio, los fans del pop adolescente se dividían entre dos jóvenes rubias.
Una de ellas era Christina Aguilera, la cantante que se llevó el Grammy a la mejor artista revelación en la edición del año 2000. Aguilera cumple 40 años volcada en su carrera y su familia.
Una chica complicada. Christina María Aguilera nació el 18 de diciembre de 1980 en Staten Island, en Nueva York, EEUU. Su madre, estadounidense con raíces inglesas, escocesas y alemanas, era música y su padre, ecuatoriano de origen, sargento del ejército del país.
Según diversos medios, los progenitores de Aguilera se divorciaron cuando ella era pequeña y, tras la separación, la cantante permaneció con su madre.
Su infancia no fue precisamente un camino de rosas en cuanto a relaciones familiares se refiere. Según han publicado diversos medios, su padre se mostraba agresivo tanto física como verbalmente hacia su madre.
En una entrevista reciente en L’Officiel Italia, la cantante hizo alusión a esta etapa de su vida en referencia a la música: “Estoy profundamente ligada al blues y al soul, porque tienen una manera pura y sincera de trasmitir los sufrimientos y alegrías de mi infancia caótica”.
Siempre estuvo entre los planes de Aguilera dedicarse a la música. Comenzó a cantar en celebraciones, como bodas o fiestas de barrio cuando tan solo tenía siete años, según publicó Woman’s Health en 2015.
De chica Disney al éxito popular. A mediados de los noventa, Aguilera formó parte del programa All New Mickey Mouse Club, de Disney, donde coincidió con otros jóvenes que, al igual que ella, serían estrellas de la música comercial más tarde, como Britney Spears o Justin Timberlake y también con el actor Ryan Gosling.
Más tarde puso voz a “Reflection”, pista incluida en la banda sonora de la película de Disney “Mulan”.
En 1998, la artista firmó un contrato con RCA Records para lanzar una serie de álbumes. Su primer éxito fue “Gennie in a bottle”.
Christina Aguilera
En la imagen Christina Aguilera junto a su pareja Matt Rutler y sus dos hijos en 2017. La artista se casó en 2005, con 24 años, con el ejecutivo musical Jordan Bratman, con quien tuvo a su primer hijo, Max.
Tras la separación de Bratman en 2010, inició una relación con su actual pareja, el guitarrista Matthew Rutler, con quien tuvo a su hija, Summer Rain Rutler.
Sobre sus hijos, dijo a la revista L’Officiel que quiere que se sientan “seguros, protegidos, libres para expresarse”.