Aunque no lo creas cuidar el medioambiente puede ser divertido, no sólo en el trabajo, sino también en la oficina o con tus amigos un día que decidan compartir fuera de casa.  Siguiendo algunas recomendaciones, la tarea de reciclar puede empezar a formar parte de sus vidas y si estás organizado en una junta de vecinos, puedes proponerlo a tu comunidad, para empezar a ser pioneros y modelos a los demás sectores y estos a su vez empiecen a imitar lo bueno.

Puedes comprar cuatro zafacones grandes, uno azul, otro rojo,  blanco  y amarillo( si no los consigues puedes pintar tres tanques con los referidos colores para identicar lo que pondrás en ellos).

En el azul puedes colocar todos los plásticos (vasos desechables, vasitos de helado, cucharitas y cubierticos  usados en la comida para llevar del fin de semana, potes de jugo, yogurt, entre otros -recuerda poner un letrerito por fuera que diga “plástico”-). En el rojo puedes colocar todo lo de cristal (botellas, potecitos de compota, biberones desechables, recipientes de mayonesa, entre otros); en el blanco puedes colocar todo lo que es de papel (papeles de baño, toallas desechables de cocina, pañales de bebés, etc.) y en el amarillo coloca todo lo que es de metal (latas, desechos de papel de aluminio, etc), finalmente todo lo que sea de cartón colócalo en un lado, amarrado entre sí y despegado de las partes que los une, de forma que quede extendido.

Haz una competencia en la casa con los niños y ofrece pequeños premios como recompensa al que mejor recicle y verás como todos querrán cooperar.   En cuanto a la oficina puedes proponer lo mismo y hacer de tu lugar de trabajo un modelo a seguir, con una rutina que tus compañeros puedan repetir en casa. ¡Al reciclar cuidarás mejor de tu entorno!.