Muchos están regresando a sus casas, luego de unos días de descanso, excursión, diversión o reflexión y mi recomendación es que de camino a la ciudad o a sus casas procuren andar con precaución, pues muchos inconscientes andan en las calles, alcoholizados e irreflexivos, no olvides que es preferible tomarte más de un minuto para llegar a casa, sin desesperación que perder la vida en un minuto, por no ser considerado camino a casa.
Trata de ser tolerante, no tomar mientras estás al volante y ser agradecido con Dios, por que en lo que realmente significa la Semana Santa es la conmemoración de la pasión, muerte y resurrección de nuestro Señor Jesucristo.
Aquel único y maravilloso hijo de Dios que dio su vida un día en la cruz, para al verter su sangre inocente e incorrompida, sólo por amor a ti, por tomar tu lugar, respecto al castigo que te correspondía por las acciones incorrectas cometidas.
Reflexiona, tómate unos minutos, haz un alto a tu vida y empieza a analizar cómo vas en la vida, hacia dónde te diriges, qué quieres, si estás seguro de dónde irás una vez dejes este mundo y si cómo te estás manejando piensa que Dios encontrará complacencia.
Tómate más de un minuto adicional para llegar a casa, no te incomodes con el que está provocando un tapón en la carretera, con el que te grita cosas feas bajo los efectos de alcohol, por el que te rebasa tan a prisa que mueve el vehículo en el que vas; no te dejes provocar, pues de tu templanza, cordura, consideración y amor demostrado hacia los demás dependerá la tranquilidad del regreso de miles a sus respectivas ciudades y de que mañana lunes puedas decir: estoy aquí, estoy bien y vuelvo a la batalla.