Cientos protestan contra Préval y jefe Minustah

Cientos protestan contra Préval y jefe Minustah

Puerto Príncipe.  EFE.  Cerca de un millar de personas se manifestaron ayer por las calles de Puerto Príncipe para protestar contra el presidente haitiano, René Préval, y contra el jefe civil de la misión de la ONU en el país, Edmond Mulet.

La manifestación se desarrolló sin incidentes y terminó en las inmediaciones del Palacio Nacional, sede de la Presidencia haitiana, donde los manifestantes se dispersaron sin intervención de la Policía.

La protesta, la sexta de estas características en las últimas semanas, incluyó las mismas reivindicaciones de las anteriores, es decir, la exigencia de dimisión de Préval, de disolución del Consejo Electoral Provisional (CEP), y las críticas al responsable de la Misión de Naciones Unidas para la Estabilización de Haití (Minustah), Edmond Mulet.

Algunos manifestantes declararon que están «cansados» del presidente Préval, quien, según ellos no tiene «ninguna credibilidad». Préval es criticado por la aprobación en el parlamento, a iniciativa suya, de la prolongación hasta 18 meses del estado de emergencia declarado en el país tras el terremoto del 12 de enero, que causó 300,000 muertos.

También se le critica por la aprobación de una prórroga de su mandato hasta mayo de 2011 en caso de que no se puedan celebrar las elecciones previstas para finales de noviembre de este año. En cuanto a Mulet, los manifestantes dijeron que lo declararon «persona non grata» y le calificaron de arrogante.

Mulet aclara

Edmond Mulet, quien dijo hace cerca de dos semanas que las elecciones deberían celebrarse el 28 de noviembre, ya contestó a estas críticas al explicar que su intención no era interferir en los asuntos haitianos, sino, simplemente, aludir a la fecha prevista en la Constitución de la nación para los comicios.

A esto añadió esta semana que las autoridades harán público pronto un comunicado para anunciar las elecciones.

Los manifestantes, por otra parte, pidieron la disolución del CEP y la instalación en Haití de «un Gobierno provisional», tal como está previsto por la Constitución, para permitir la organización de «elecciones anticipadas, libres y creíbles».

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