Por MARIEN ARISTY CAPITAN
Loas a la Patria, proclamas religiosas, discursos independentistas y flores. Esos fueron algunos de los ingredientes de una jornada en la que muchas personas decidieron acercarse hasta el Altar de la Patria para honrar el recuerdo de quienes proclamaron la Independencia Nacional aquel 27 de febrero de 1844.

Desde tempranas horas de la mañana el Parque Independencia vio cómo se iba sucediendo un desfile informal que mantuvo el espacio en permanente movimiento. Es que no sólo asistieron representantes de instituciones y oficinas gubernamentales: también hubo padres que fueron hasta el lugar para ofrecerle a sus hijos una improvisada e interesante clase de historia.

Con o sin flores, lo cierto es que los Padres de la Patria han sido muy visitados últimamente. Así lo atestiguan las coronas marchitas que aún se veían en el lugar y que comenzaron a colocarse detrás de las que iban llegando.

Entre las coronas nuevas, que resaltaban por su tamaño y colorido, se encontraban la de la Secretaría de Educación, las Fuerzas Armadas, la rectoría de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), el Instituto Duartiano, la Unión Nacional de Artistas y Afines de la República Dominicana, el Distrito Educativo 15-05, el Colegio San Francisco de Asís, el Senado de la República y el Sindicato de Guías Oficial Turísticos de Santo Domingo.

Pero no sólo las flores y su aroma estuvieron allí. También hubo entonaciones del Himno Nacional y proclamaciones de lo más variadas. Por ejemplo, ayer la República Dominicana quedó “oficialmente” declara como propiedad de Dios.

“Proclamamos el Señorío de Jesucristo sobre esta Nación”, aseguró Ana Inés Polanco al tiempo de sostener que a partir del día de ayer la lucha a favor de la Patria se fortalecería. Todo gracias a la decisión que han tomado las “Mujeres Cristianas por la Nación”: formar en la conciencia de sus hijos el amor por la tierra que les vio nacer.

Por otra parte, Sandra Castillo, otra de las representantes del movimiento, indicó que esperan que en las próximas elecciones no se derrame una gota de sangre en el país. Tras sus palabras, con Biblias negras en las manos, llegó el momento de la oración.

Tras la marcha de las mujeres, le tocó el turno a la revolución. Encabezados por Narciso Isa Conde y Fernando Peña, ex dirigentes del partido izquierdista Fuerzas de la Revolución, apareció un grupo de hombres vestía camisetas rojas en la que se leía ¡Caamaño Vive!.

El primero de ellos en hablar fue Fernando Peña, quien rechazó la presencia de los oficiales de los Estados Unidos que se encuentran en Barahona realizando labores humanitarias.

Sosteniendo que era muy oportuno que el 27 de febrero se reclame la salida de las tropas norteamericanas, Peña indicó que ellos están en el país bajo el pretexto de construir escuelas. La intención real, a su juicio, es otra.

“Nueva vez tropas extranjeras mancillan la dignidad de la Patria. Hoy 27 de febrero un contingente agresivo de 800 soldados imperialistas norteamericanos, con la infeliz excusa de construir siete escuelas hace exhibición de carros extraños, helicópteros artillados y de fusiles modernos, están acampados en una retada ciudad sureña querida por nosotros y de tradición heroica”.

Después de subrayar que el “contingente pretende llegar a 4,500 soldados”, Peña se quejó de que quienes han gobernado el país en los últimos años han reiterado su condición de serviles ante el imperio norteamericano.

Terminada la intervención de Peña, Isa Conde anunció que se marcharían hasta Barahona para protestar contra el doblegamiento de la clase política del país y reclamar la salida de las tropas. Es que, apuntó, la República debe continuar siendo la Patria libre e independiente que Juan Pablo Duarte soñó.

Ese Duarte, por cierto, ha estado muy presente en esta área desde el pasado 23 de febrero cuando se inauguró la exposición “Duarte en la historia de la Patria”, una muestra que está ubicada en la verja que rodea al Parque Independencia.

Con fotografías de pinturas, esculturas y textos relativos a la vida de Duarte, en esta exhibición de hace un interesante repaso de cómo se gestó la Independencia Nacional. Y esto ha sido posible gracias a la iniciativa de la Fundación Patria Visual, de Sócrates Suazo.

En su presentación, Suazo habla del porqué de esta muestra: “Juan Pablo Duarte es el arquetipo por excelencia de la dominicanidad. Una generación ha encontrado en sus escritos inspiración. Otra, en su vida, ideales. Y la siguiente, en la serenidad de su frente y el don apacible de sus ojos, ha oteado el horizonte”.

Recordarlo, entiende Suazo, es necesario en estos momentos. “En las horas de prueba para la Nación, consciente o inconscientemente, los costados activos de la República Dominicana han tornado hacia él sus miradas anhelantes para buscar aliento y templar la voluntar (…). Entre los pueblos, como entre los individuos, el retorno a los orígenes es cura de inseguridades y remedio de incertidumbres”.

Estas palabras, así como el resto de la exposición, llamó la atención de todos los que se acercaron al parque. Recordando la historia, y quizás descubriendo algún detalle que el olvido borro de sus memorias, convirtieron el día de ayer en una verdadera jornada patriótica.