La mortalidad materna bajó en la República Dominicana, según  datos de la Dirección General de Epidemiología,  entidad del Ministerio de Salud Pública.

Sin embargo, una sola muerte constituye una tragedia, de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS).

 Los datos de Epidemiología dan cuenta de que la mortalidad bajó en un 16%, por lo cual el país fue reconocido recientemente en Washington por el gobierno norteamericano.

La mayor cantidad de muertes maternas se registran en los hospitales de gran concentración de mujeres, como son La Altagracia y San Lorenzo de Los Mina, en Santo Domingo, donde han muerta este año 12 y 2, respectivamente.

Asimismo el hospital Antonio Musa, de San Pedro de Macorís registró tres muertes; el Luis Eduardo Aybar, 10, el Cabral y Báez, siete.

La baja en este indicador se debe a una estrategia sostenida que se realiza desde hace años, y a   que ahora el médico o enfermera que hayan sido negligentes son sancionados, señalan las autoridades.

Desde el año pasado, las autoridades han sancionado a siete médicos cuyo ejercicio ha estado comprometido en la muerte de parturientas en los hospitales.

Entre los hospitales en los  que han sido sancionados médicos están el Antonio Musa, de San Pedro de Macorís; el Materno Infantil, de Villa Mella, el de Hato Mayor y el de Neiba, aseguró José Deláncer, director del programa Materno Infantil.

Por décadas, la principal causa de muerte materna ha sido la hemorragia.  Ahora la principal causa   es la  hipertensión, pero se hacen cambios para mejorar la calidad de los servicios.

 La reducción de la mortalidad materna es uno de los Objetivos del Milenio, que todavía no se   logra.

(Esta nota se publica ahora de manera correcta porque por un error de interpretación  estadística, ayer la redactora dijo todo lo contrario.)