POR PEDRO GERMOSEN
El «plan b» que aplicaría el gobierno si el Congreso Nacional no le aprueba la reforma fiscal constituye, para cinco senadores del opositor Partido Revolucionario Dominicano (PRD), una presión, chantaje, amenaza y una declaratoria de guerra sin cuartel. De esta manera, los senadores César Matías, Mario Torres, Enrique Seijas, Juan Morales y Pedro Antonio Luna rechazaron la advertencia del secretario general del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Reinaldo Pared Pérez.

     Matías, de Valverde, dijo que con su advertencia sobre el alegado «plan b», la cúpula del PLD y su gobierno parecen haber cerrado el camino del diálogo, la conciliación y el consenso.

     El legislador exhortó a Pared Pérez a que identifique cuál es el susodicho «plan b» o, de lo contrario, advirtió, los legisladores del PRD aplicarán un «plan c», que tampoco reveló.

     Recordó que la democracia es diálogo, consenso, entendimiento y respeto de las mayorías.

     De su lado, Torres, de Dajabón, expresó que el citado plan parece una posición descabellada, porque procura que las cámaras legislativas aprueben la reforma fiscal tal y como la sometió el presidente Leonel Fernández.

     Señaló que los bloques parlamentarios perredeístas han hecho un buen ejercicio de comprensión y gobernabilidad, incluso, sostuvo, rayando a veces los lineamientos del PRD.

     Torres expresó que el «plan b» que Pared Pérez no explicó puede interpretarse como una amenaza de cerrar el Congreso, de gobernar por decretos y de hacer abortar las elecciones próximas.

     Por su lado, Seijas, de La Romana, dijo que «las amenazas» del secretario general del PLD no conducen a nada bueno, sobre todo en momentos en que el Gobierno ha llamado a los partidos de la oposición a un diálogo.

     Indicó que si, como declararon hace un tiempo funcionarios del equipo económico, el gobierno hizo ahorros por unos RD$40,000 millones, la aprobación de la reforma fiscal para sustituir los ingresos de aranceles y el recargo cambiario, no tiene tanta urgencia.

     Seijas advirtió, además, que sería catastrófico que se concretice la amenaza del director de Impuestos Internos, Juan Hernández, de que necesita cárceles para seguir cobrando tributos.

     Al ofrecer su parecer, el senador Morales, de Hato Mayor, expresó que el «plan b» indica que el Gobierno ha decidido recorrer el camino de la confrontación con los partidos opositores.

     Manifestó que esa advertencia ha sido interpretada como una presión o chantaje de las autoridades.

     Morales entiende el mensaje como que el gobierno no le aceptaría los presupuestos de las cámaras legislativas y reduciría las asignaciones de los ayuntamientos, dirigidos en su gran mayoría por la oposición.