Hoy 
POR ELVIS LIMA
El magistrado Francisco Ortega Polanco, juez de la Corte de Apelación del Distrito Nacional, puso anoche en circulación su libro Código Procesal Penal, por un juez en ejercicio, que constituye un aporte para la comprensión, aplicación y estudio de la reforma procesal penal en la República Dominicana.
La obra, que consta de 560 páginas, incluye una concordancia con la jurisprudencia nacional correspondiente al nuevo Código y un índice temático que facilita el manejo del material.
También contiene unas 600 notas al margen y apostillas que refieren similitudes y diferencias con los códigos procesales penales extranjeros.
Asimismo, establece comparaciones con el código de procedimiento anterior, con las principales leyes complementarias, así como también una relación de las principales resoluciones y medidas dispuestas por la Suprema Corte de Justicia para su aplicación.
El acto, que tuvo como escenario el auditorio de la Suprema Corte de Justicia, fue encabezado por su presidente, Jorge Subero Isa, quien hizo la presentación de la obra, mientras que el magistrado Edgar Hernández, juez de la Cámara Penal del organismo, tuvo a su cargo el prólogo.
En tanto, el empresario José Luis Corripio Estrada fungió como invitado de honor.
Al ponderar la importancia de la obra, Subero Isa destacó las cualidades humanas y profesionales de Ortega, a quien calificó como un excelente juez.
Consideró que el autor se las ingenió para en cada principio fundamental poder consolidar asuntos muy importantes y puso como ejemplo el capítulo primero, donde se reserva la primacía de la constitución, y los tratados que él comprende, los cuales son la base legal de la primacía constitucional.
Una obra que viene a sostener el criterio que, por lo menos, el presidente de la Suprema Corte de Justicia ha impuesto en más de una ocasión, que el gran soporte del Código Procesal Penal y de toda la estructura de la nueva normativas procesal penal del país, han sido los jueces, añadió Subero Isa.
De su lado, el doctor Hernández afirmó que de la abundante literatura jurídica publicada en los últimos años en el país en libros y revistas, sobre materia procesal penal, el presente trabajo es el más profundo, correctamente escrito y conceptuoso.
Agregó que eso hace del libro una obra fácil de entender entre profesionales o, no del derecho, debido a la profundización realizada por el autor en su contenido.
En esta obra encontrará el lector entre otros semejantes temas; el significado, alcance e importancia del principio y primacía de la Constitución, y del tratado internacional en relación a la ley adjetiva, sostuvo Hernández.
Señaló que la misma también plantea la forma en que el juez deberá aplicar su decisión, tomando en cuenta en todo momento los principios fundamentales.
Dijo que otra virtud que tiene la obra es que la misma desarrolla de modo claro y comprensivo la relación entre articulados del Código Procesal Penal, con los restantes 27 principios fundamentales.
El trabajo posee otra gran virtud que consiste en citar similitudes y diferencias de códigos procesales, deferencias con legislaciones extranjeras lo cual ofrece la oportunidad de revisar y de elaborar un razonamiento global en el orden del derecho a comparar, explicó el magistrado.
El autor
De su lado, Ortega resaltó el propósito de que esta obra arroje luz en el estudio del novedoso y controversial Código, de modo que jueces, fiscales, abogados, estudiantes de derecho e interesados en general, cuenten con un referente académico.
Uno de los momentos más emotivos fue cuando el autor hizo mención de su madre, dona Chana Polanco viuda Ortega, quien estuvo en el extremo derecho de la mesa principal, y de su padre fallecido Francisco Ortega Díaz (Tocón), a quien le dedica la obra, lo que provocó el aplauso de los presentes y la conmoción de otros.
Al acto asistieron abogados, estudiantes y demás personas ligadas al quehacer judicial del país.
