POR ALEIDA PLASENCIA
CASA DE CAMPO, La Romana.-De 17 mil empleados que tiene la administración pública en el sector agropecuario, sólo hay 3,000 mil técnicos, lo que indica que «tenemos 14 mil burócratas para apoyar a tres mil gentes», dijo el vicepresidente ejecutivo de la Junta Agroempresarial Dominicana (JAD), Omar Benítez.

En ese escenario, según él, el sector agropecuario nacional padece un gran atraso en materia de tecnología, mientras hay  pocos técnicos a su servicios en comparación con el número de empleados de las entidades estatales encargadas de dar servicios a este sector.

Benítez, al participar en una reunión llevada a cabo en una villa de Casa de Campo, cuyo encuentro fue auspiciado por los promotores de la institución recién creada denominada «Lobby del Exportador Dominicano», resaltó que en el presupuesto del Gobierno relativo al sector agropecuario del presente año, hay asignada la suma de cinco mil 500 millones de peso. Pero, en 20 años, analizando la ejecución presupuestaria del sector, se observa que «nunca se ha ejecutado más de un 77%», dijo.

Lo que indica, según él, que el sector recibiría este año unos cuatro mil millones de pesos.

En referencia a qué beneficio recibe el sector agropecuario del presupuesto estatal en materia de tecnología, Benítez refirió que en San Juan de la Maguana en estos momento hay cerca de 280 profesionales agrícolas, y según los testimonios de los propios productores, en bien de ellos no se está trabajando en ese sentido. Según explicó, el dinero del presupuesto no se estaría gastando en lo que debería en materia de contribución con los productores del campo.

Según Benítez, en el sector agropecuario del país hay una dicotomía muy grande. Se trata de que hay una minoría con tecnología bien avanza, y una gran mayoría de productores que no se «ha enterado de que existe una computadora», expresó.

También resaltó que el sector agropecuario del país está muy atrasado en materia de su marco jurídico y urgió una reforma integral o sistémica que reforme la agropecuaria en ese sentido.

En ese sentido, dijo que la ley más reciente tiene 40 años. La Ley de Sanidad Vegetal data de 1956 y la de Anidad Animal de 1953, añadió.

Expresó que los países pequeños, como República Dominicana, en esta materia deben concentrar su atención en el plano sanitario y fitosanitario.

Al respecto consideró necesario poner énfasis en el fortalecimiento y ampliando la rigurosidad de las leyes sanitarias, a los fines de proteger la producción nacional y la salud de los consumidores.

Como ejemplo del atraso que padece el país en referencia al marco jurídico de la agropecuaria, refirió que para trasladar un animal de un lugar a otro del territorio nacional, hay que obtener de las autoridades del municipio correspondiente n «certifico».